Marcelo Galindo Gallardo

Un completo proceso de reconversión están comenzando a vivir los llamados recolectores del vertedero municipal Lagunitas en Puerto Montt, debido a que se estima que de aquí a menos de dos años este lugar será cerrado, y hasta donde llegan todos los desechos sólidos domiciliarios de Puerto Montt estimado en más de 230 toneladas diarias.

Los pobladores que viven y trabajan en este lugar están conscientes del cambio que se viene y por ello se han organizado en comités de vivienda e incluso con la posibilidad este año de regularizar sus estudios. Se estima que en este lugar viven alrededor de 70 familias, entre ellos, 58 niños.

Susana Cárcamo es una de las vecinas y trabajadora del vertedero. "Antes de llegar acá vivimos en la ladera del cerro del sector puntilla Mirador, pero hubo un derrumbe hace más de tres años, y nos tuvimos que venir acá y trabajar en la recolección de cosas. Para nuestros hijos fue muy difícil especialmente para el mayor por los olores, la forma de vida, pero al final todos nos acostumbramos y postulamos a nuestra casa donde esperamos poder irnos a vivir allá este año".

Al proseguir Susana señala que la vida en el vertedero es tranquila donde se trata de llevar el día a día con lo que hay. "Recolectamos papeles, cartones, chatarra, cobre y latas de bebidas. Con ello, cuando está bueno, logramos juntar alrededor de 100 mil pesos. No es más porque lo que pasa es que llega mucha, pero mucha gente acá y se suma la gente que recolecta directamente en los contenedores. En cuanto al agua, hace como tres semanas que comenzó a llegar el camión que viene dos veces a la semana, pero antes mi familia me ayudaba y me traían tres bidones de 15 litros, lo que duraba una semana, pero ahora como la municipalidad dispuso de este camión, nos ha ayudado bastante especialmente en el verano".

El concejal socialista Fernando España conoce de cerca esta situación y en varias oportunidades ha sostenido reuniones con los pobladores, pero indica que cuando fue la primera vez se impresionó.

Dice que conoce claramente los problemas de la extrema pobreza, "pero vivir en un vertedero supera todo lo que se puede ver en esto. Ellos (los residentes de este lugar) decidieron levantar una vivienda con lo que recogen allí, y es un lugar donde hay varias familias, que cuentan con una directiva de comité de vivienda, quienes pronto van a recibir sus casas, que incluso quedarán cercanas al vertedero, en el sector de Cardonal. También hay un segundo comité de vivienda que inició su proceso para lograr el objetivo que es una casa habitación. Nos hemos reunido varias veces en su sede social y nos han hablado de sus necesidades, por ejemplo que no se termine el agua potable, porque va el camión aljibe de la municipalidad dos veces a la semana, pero ellos están trabajando para contar con un estanque, y puedan contar en forma permanente con agua".

Al proseguir el edil se refiere a un reportaje de televisión realizado hace algunas semanas. Aclara que en materia de educación, no hay ningún niño que no se haya matriculado, hay que recordar que éste año se consideran todos los útiles, que es un tremendo aporte para aquellas familias que tienen tres o cuatro hijos estudiando. "Hay que buscar solución a los problemas de movilización, se necesita un bus de acercamiento para los 53 niños que van al colegio. Deben caminar mucho y a veces con malas condiciones del camino por la lluvia. Se realizó un reportaje sobre el vertedero y se habló del ausentismo escolar, ello no es así porque el 100 por ciento de los niños que viven allí cuentan con matricula, e incluso en mayo una empresa privada entregará clases a las personas adultas que quieran regularizar sus estudios. Ya sabemos que hay 20 interesados e incluso para ellos también habrá útiles", dijo.

Alex Aburto es el presidente del comité de vivienda y explica que la preocupación radica ahora en la reinserción laboral. "Estamos trabajando con las autoridades para lograr un cambio en ello, pero son muchas las cosas que si hemos obtenido, como una sede social, la regulación de estudios para los adultos, proyectos Fosis y el apoyo de diversas instituciones", manifestó.

El concejal Fernando España apunta a la necesidad de cambiar algunos sistemas. "Una vez que se cierre se debe implementar el reciclaje de la basura desde su origen, es decir antes que el camión la transporte, nos referimos al tratamiento que debe haber al cartón, latas, fierros, botellas de vidrio o plásticas. Este es el punto para capacitar a estas personas, y por lo tanto modificar la forma de reciclar".

El concejal PRI Pedro Sandoval señala que en abril próximo el alcalde (Gervoy Paredes) se tiene que pronunciar respecto a la situación de La Laja y el cierre del vertedero Lagunitas.

El edil relata que una vez que ocurra ello hay que tener una reconversión laboral para ayudar a los recolectores. "Cuando se entregó la concesión de la recolección y tratamiento de basura se habló que se iba a ayudar a estas personas. La pregunta es cuándo se cierra el vertedero y qué se hará con quienes viven allí, es necesario saber cuándo será el cierre, y qué pasa con la participación de Puerto Montt en el proyecto La Laja. Hay una propuesta clara por el cierre, que habla sobre mil 500 millones de pesos. Existe un daño medioambiental y social que se debe considerar y por ello hay que definir qué pasará con el vertedero. Hay que pronunciarse porque existe un tiempo perentorio que hablaba de seis meses, por lo que tendría que haber un pronunciamiento ahora en abril. La municipalidad tiene que ser clara en este sentido", comentó Pedro Sandoval.

"Nos hemos reunido varias veces en su sede social y nos han hablado de sus necesidades, por ejemplo que no se termine el agua potable, porque va el camión aljibe de la municipalidad dos veces a la semana".

Fernando España

Concejal de Puerto Montt.