Trastornos del ánimo y depresiones: las patologías psiquiátricas más comunes en Puerto Montt
RED DE SALUD. Factores genéticos, pero por sobre todo ambientales, influyen en estas enfermedades, que están siendo tratadas en los recintos dependientes del Servicio de Salud del Reloncaví.
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Los trastornos del ánimo y las depresiones son las patologías que se presentan con mayor recurrencia en las atenciones psiquiátricas en Puerto Montt.
Así lo expuso el doctor Federico Venegas, director del Servicio de Salud del Reloncaví (SSR), quien precisó que aproximadamente un 25 % de la población en el país ha presentado o presenta un trastorno del ánimo, lo que pone a Chile como "uno de los países con los más altos índices de depresión".
Especificó que entre los factores que generan estos cuadros, están los de tipo genético y los ambientales. "Se piensa que mucho tiene que ver con la situación de vida que tenemos. Aunque estemos en una ciudad que no es grande, implica una presión y un estrés permanente de estar recibiendo influencias físicas", dijo.
Venegas precisó que en ese aspecto, los efectos ambientales influyen mucho, como la familia, la vivienda, movilización, ingresos y las expectativas que se tienen.
SUICIDIO
Al ser consultado si es que la depresión está ligada a los suicidios, afirmó que eso es efectivo, y que "también tenemos altos indicadores", que están en 13,3 por cada 100 mil habitantes, de acuerdo al más reciente Informe Panorama de Salud 2013 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Argumentó que otros países muestran índices mucho más bajos, que rondan en 8 por cada 100 mil personas.
Respecto de los datos locales, afirmó que carecen de una información regular y precisa.
Mientras que el psicólogo José Cabrera, profesor de la Escuela de Psicología de la sede local de la Universidad Austral, planteó que "es necesario cambiar el ángulo de la habitual pregunta sobre el suicidio. ¿Es un problema, un trastorno, una respuesta propia de una mente enferma, la manifestación final de las críticas condiciones sociales en que nos encontramos? Tal vez todas estas preguntas, y sus posibles respuestas, resuelvan sólo de forma parcial la incógnita del suicidio. Apreciar este fenómeno desde otra perspectiva implica situarlo dentro del terreno de la existencia humana; es decir, en el terreno de la conflictiva y a veces confusa pregunta acerca de la propia existencia".
Llamó a reconocer "los signos del pesar en nuestros cercanos, suponer que las pérdidas o quiebres importantes nos exponen a nosotros y a los demás, ya sea a momentos de cuestionamiento radical sobre la propia existencia, como a acciones que irrumpen sin la mediación del pensamiento. Son los momentos de reorganización de la vida, los que son indisociables de cierta ruptura de un estado anterior, tales como la adolescencia, la vejez, la pérdida del amor o las dificultades económicas, los que pueden precipitar a alguien por las vías de la imaginación suicida. Pero también las experiencias del exceso, de las que nuestra época es generosa en ejemplos, son un terreno en el que ponemos en riesgo la vida: el consumo de sustancias mucho más allá de los márgenes del placer, la violencia como forma válida del lazo social, los ideales de perfección de diverso orden que nos atormentan por su inaccesibilidad, son también una dimensión en que el acto suicida puede hacer aparición, de manera incluso aún más riesgosa que en el caso de la pérdida o la ruptura", agregó.
EN EL HOSPITAL
El doctor Venegas destacó que a través de las GES es posible "atender bien las patologías graves, como la esquizofrenia y depresión".
Aseguró que todas las enfermedades mentales pueden ser tratadas tanto en la Red de Atención Psiquiátrica de ese servicio, como en núcleos familiares o comunitarios.
En el Hospital Puerto Montt se atiende generalmente patologías asociadas a depresiones severas, cuadros psicóticos, algunas esquizofrenias descompensadas y trastornos del ánimo. Para ello, se aplican tratamientos específicos, que incluyen rehabilitación con terapeuta ocupacional, tratamiento psicosocial y uso de psicofármacos, para lo cual tanto el hospital como los dos Cosam disponen de "un buen arsenal terapéutico de última generación", que los pone al mismo nivel de tratamiento que se entrega en recintos asistenciales de Estados Unidos.