Djokovic y Murray van por el primer Grand Slam del año
tenis. El número uno del mundo batió en cinco sets a un Stan "agotado mentalmente".
El tenista serbio Novak Djokovic (1º) ganó ayer al suizo Stanislas Wawrinka (4º), triunfo que lo instaló por quinta vez en la final del Abierto de Australia.
Tal como en Australia 2013 y 2014, y como en el US Open 2013, el duelo de ayer se definió en cinco sets.
Aunque los antecedentes invitaban a acomodarse para un juego más largo, el número uno del mundo se impuso por 7-6 (1), 3-6, 6-4, 4-6 y 6-1 en tres horas y 35 minutos.
En el inicio, el partido fue saque a saque hasta que Wawrinka presionó con su derecha al límite hasta quebrar el servicio de Djokovic. Así, se concretó la segunda vez en todo el torneo que el serbio perdía el saque.
Frustrado, Djokovic golpeó su banco con la raqueta, a la que luego hizo rebotar contra el cemento azul de Melbourne.
El serbio regresó al rectángulo dispuesto a recuperar lo perdido. Lo hizo, y de forma contundente, porque desesperó a su rival devolviendo absolutamente todos sus tiros y abriéndolo hacia su derecha, un tiro que suele complicar al suizo.
Djokovic habló del duelo y dijo que "ha sido una gran batalla, nos presionamos el uno al otro hasta el límite. Felicito a Stan porque es un gran adversario".
Sobre el partido, el serbio reconoció que se complicó "sobre la pista, el primer juego del quinto set fue el momento clave, donde todo cambió. Hubo periodos del partido en los que estuve demasiado pasivo y no puedes mostrarte así contra Stan".
El suizo, en tanto, declaró que antes del duelo "le dije a mi entrenador que estaba, mentalmente, completamente muerto". Aunque se encuentra "físicamente bien, estoy jugando bien, pero creo que mentalmente pagué la final de la Copa Davis, el no haber tenido demasiado tiempo libre", añadió el número cuatro del mundo.
El número uno del ranking ATP disputará mañana su décimo quinta final de Grand Slam que, en esta ocasión, tiene en frente al británico Andy Murray.
De 23 enfrentamientos entre los finalistas, el serbio tiene una ventaja de 15-8 sobre el británico.
Respecto de su rival, Djokovic recordó que "con Andy jugamos por primera vez a los 12 años, tenemos una buena relación fuera de la cancha. Es agradable ver que jugamos otra final de Grand Slam".
Murray buscará ganar su primer Abierto de Australia y su tercer trofeo de Grand Slam, donde en dos de esos triunfos tuvo a Djokovic como rival.
Pese al resultado de mañana, Djokovic conservará su puesto a la cabeza del ATP. Mientras que Murray será cuarto si pierde y tercero si vence.
Mientras, la final de la competencia femenina se define hoy entre la estadounidense Serena Williams (1º) y la rusa María Sharapova (2º), quienes se han enfrentado 16 veces. La número uno tiene una clara ventaja de 16-2.
Aunque el número uno no está en disputa, ambas tenistas luchan por cosas importantes: Williams apuesta por su décimo noveno Grand Slam y Sharapova busca derrotar a la estadounidense luego de más de diez años.