El "no" a las propuestas de ajuste se imponía ayer ampliamente en Grecia, donde más del 60% de los votos del referéndum rechazaba el programa de los acreedores internacionales.
Con el 90% de los votos escrutados, el "no" se imponía con el 61,42% frente al "sí", que obtenía el 38,58%, un reflejo de que el pueblo heleno dio la espalda a las políticas de austeridad. La participación fue de más del 50%, lo que permite que su resultado sea jurídicamente válido.
De esta forma, el Gobierno del primer ministro Alexis Tsipras lograría un respaldo a su postura en las negociaciones con los acreedores, que exigen amplias reformas y recortes para entregar nuevas ayudas.
Tsipras afirmó que su Gobierno reiniciará hoy las negociaciones con los acreedores para tratar de alcanzar un acuerdo y afirmó que es consciente de que el voto que dio ayer el pueblo "no es un mandato de ruptura".
"Mañana (hoy) reiniciaremos la negociación. Nuestra prioridad es el funcionamiento del sistema bancario", dijo Tsipras en un mensaje televisado para añadir que en esta ocasión entrará en la negociación la reestructuración de la deuda, una necesidad que, dijo, incluso ha reconocido el Fondo Monetario Internacional.
Apenas se conocieron los primeros resultados oficiales estallaron los festejos en el centro de campaña del "no". La televisión mostró cómo cientos de seguidores del rechazo a los ajustes se congregaron en la plaza que se ubica frente al Parlamento en Atenas para celebrar.
"Esto demuestra que el pueblo griego no puede ser presionado, aterrorizado y amenazado. Gana la democracia", escribió en Twitter el ministro de Defensa griego, Panos Kammenos, jefe del partido populista de derecha Griegos Independientes (Anel).
El resultado del referéndum cobró ya su primera víctima política: el presidente del principal partido de la oposición, Nueva Democracia, Andonis Samarás, que había hecho campaña por el "sí".
El presidente del Parlamento Europeo (PE), Martin Schulz, dijo que tras la consulta, Grecia está en una situación difícil y que Atenas debe plantear propuestas que convenzan al resto de países de la eurozona y a las instituciones europeas de volver a la mesa de negociaciones.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, convocó a una cumbre de líderes de la eurozona para mañana a las 16.00 GMT. con el fin de discutir la situación griega.
Casi diez millones de griegos con derecho a voto estaban llamados a las urnas en más de 19 mil colegios electorales, después de que Tsipras convocara el referéndum por sorpresa el 27 de junio tras una ruptura de las conversaciones entre Atenas y sus acreedores: la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Si bien el paquete de rescate al que estaban vinculadas las exigencias de los acreedores venció el 30 de junio, el resultado del referéndum es considerado una pieza clave en la decisión sobre cuál será la solución a tomar por Atenas en la crisis de deuda.