La política de la corrupción
"En SQM, moros y cristianos, de derecha e izquierda, pedían dinero a Julio Ponce Lerou..."
La irrupción de los casos Penta, SQM, Caval, Corpesca, Colusiones, Milicogate, Junaeb, han mostrado el verdadero país en el que hemos navegado en los últimos años post recuperación de la democracia.
Si en plena dictadura delincuentes de cuello y corbata se apropiaron de las empresas del Estado a precios de "huevo", comenzando a cimentar sus fortunas, que perpetuaron con riquezas inconmensurables, hoy son esos mismos los que lograron mostrarnos con sus defraudaciones al Estado, el lazo estrecho que han tenido con la política contingente de este país.
Porque no nos hagamos los locos. Los abusos sostenidos de las AFP, las Isapres, los Bancos, las farmacias, etc., sobre nuestros compatriotas, tienen un nombre y apellido: "La incestuosa relación entre el dinero y la política", que ha permitido (quizás por cuantos años), tener un Parlamento cooptado por esos intereses. Lo de Orpis e Isasi en la ley de Pesca no es casualidad. Estaban absolutamente comprados por esos intereses para legislar. ¿Serán ellos los únicos? Apostaría que no y que hay muchos más, por lo que es valorable la resolución del congreso nacional del PS de exigir a los 20 parlamentarios que fuimos parte de la comisión de pesca en plena tramitación de dicha ley, que pidamos a Servel que revelen nuestros aportes reservados de campaña.
No es casualidad lo de Longueira con el royalty minero; es gravísimo lo de Novoa y el rol que jugó con Penta para defraudar al Estado y financiar a su partido y sus campañas. Y por qué temer decirlo, es indigno tener a una UDI que más que condenar estos deplorables actos, los justifique blindando a sus figuras gravemente comprometidas.
En SQM moros y cristianos, de derecha y de izquierda, desfilaban para pedirle dinero al líder de las privatizaciones truchas de Chile, Julio Ponce Lerou, incluyendo a conspicuos socialistas como Rossi e hijos de víctimas de violaciones a los derechos humanos, como es el caso de MEO.
Con la ley reservada del cobre y Milicogate, las licitaciones fraudulentas de Junaeb y el caso Caval, tenemos el escenario más que claro para mostrar el nivel de corrupción al que estamos llegando.
En nuestra región, lo de los "taxis voladores" si bien es una "rasquería" inaceptable, muestra ya las sinvergüenzuras en su extremo. Y recuerdo que cuando denuncié este hecho al ex intendente Abud, sólo atinó a reírse y no creerme. Cosas de la vida.
Diputado de la República. Región de Los Lagos.
Fidel Espinoza Sandoval.