Se agrava embancamiento en lago Tagua Tagua y comunidad exige rápida solución
PROBLEMA. Zona cordillerana de la Comuna de Cochamó está afectada por el desabastecimiento y la Dirección de Obras Portuarias inició investigación para establecer la causa de la falta de agua. BALANCE. Pto. Varas, Maullín y Llanquihue lideraron los incidentes de bañistas en el agua.
El desabastecimiento está comenzando afectar a los habitantes de la zona cordillerana de Llanada Grande y los alrededores, debido a la falta de conectividad que ha provocado el embancamiento del conocido lago Tagua Tagua en Cochamó.
El problema se ha registrado durante los últimos dos años, pero durante la actual etapa de verano, la falta de agua en el lago se ha incrementado y notado.
Los residentes de zonas como Llanada Grande, Primer y Segundo Corral, Valle Ventisqueros y el Río Manso, están pidiendo una pronta solución a esta problemática, pero además solicitaron que se investigue el origen de este embancamiento.
Debido a que la barcaza no ha podido cumplir con normalidad su recorrido, se han generado problemas en abastecimiento, tanto de alimentación, como de combustible y mercadería. A ello se suma la suspensión de las clases, porque no podía llegar la comida de los alumnos y los vecinos han debido sortear la falta de conectividad con lanchas y botes, lo que significa un riesgo y un gasto extra para los afectados.
Patricio Villanueva, director regional de Obras Portuarias (DOP), dijo que los equipos de este organismo han recorrido la zona y han encontrado nuevos bancos de material sedimentario.
Reservas
Son alrededor de mil 800 las personas que residen en todo este punto de la Provincia de Llanquihue, que es muy frecuentado en período estival.
En Llanada Grande están preocupados por el daño que esta situación podría provocar a la actividad turística.
"Teníamos muchas reservas de turistas en el mes de marzo y hemos tenido que devolver algunos depósitos. Queremos que las autoridades locales, regionales y nacionales investiguen las reales causas del embancamiento del lago, que en mi opinión es responsabilidad de la empresa Mediterráneo y la construcción del camino", afirmó María Diocares, vecina de Llanada Grande.
Rodrigo Condeza, presidente de la Corporación Puelo Patagonia, coincidió con la residente de Llanada Grande.
"Es evidente que la construcción del camino para el proyecto hidroeléctrico en estos últimos dos años coincide con la paralización de la barcaza en el lago Tagua Tagua. Queremos que las autoridades investiguen a fondo si se debe a este motivo o no. Todo indica que así es. Pero necesitamos datos duros para que sea Mediterráneo, quien pague el restablecimiento de la conectividad. El gobierno está gastando muchos recursos en algo que antes nunca había ocurrido", argumentó.
El director regional de Obras Portuarias (DOP), Patricio Villanueva, dijo que el origen de esta situación se va a investigar.
Explicó que la idea es saber qué cantidad de arrastre de material se registra en lo que se llama embancamiento.
"Se comenzó hoy (ayer) a realizar una segunda batimetría. Ya se había ejecutado una en diciembre y ello va a permitir comparar y determinar cuánto ha embancado el lago, en términos de volumen de material. Esto va a permitir establecer además la cantidad de agua que ha bajado", anotó.
Villanueva añadió que se busca conocer con certeza qué sectores del lago pueden ser intervenidos con maquinaria.
"El objetivo es lograr una mayor eficiencia en esta zona, pero además esta labor permite generar una medida paliativa mientras se realiza la licitación para el dragado de mayor volumen", explicó.
El llamado a licitación está en pleno desarrollo y el 8 de abril será la apertura de las ofertas.
El diputado (DC) Patricio Vallespín convocó a las autoridades para que esta situación sea investigada.
Para el legislador es importante saber si la construcción de caminos que se ejecuta para el proyecto hidroeléctrico de la central Mediterráneo, es la que está provocando que los sedimentos obstaculicen el funcionamiento de la barcaza. "No es posible que por los trabajos que realiza una empresa privada, se esté afectando la conectividad de toda una comunidad", expresó Vallespín.
Cuatro muertos y un desaparecido es el saldo que dejó el verano en la provincia
Un total de 35 veraneantes (28 hombres y siete mujeres) sufrieron algún accidente durante la temporada estival 2015-2016. De ellos, 17 resultaron ilesos, 10 lesionados, cuatro resultaron muertos (tres en Puerto Varas y uno en Puerto Montt), mientras que aún no se tiene rastro de un bañista que desapareció en la desembocadura del río Llico en diciembre pasado.
De acuerdo a lo informado por el gobernador marítimo, capitán Pedro Valderrama, la tasa de accidentes se mantuvo pese a que este verano se registró un aumento en el número de visitantes en la provincia de Llanquihue, sin embargo el número de fallecidos subió con respecto al año anterior, donde fueron tres fallecidos, sin personas desaparecidas.
Con respecto a los accidentados, el verano 2015 se produjo un aumento de éstos en personas entre los 50 y 55 años, mientras que este año el mayor número fue entre 16 y 20.
En tanto, las víctimas fatales fueron en su mayoría jóvenes entre los 24 y 34 años de edad.
Las comunas de Puerto Varas, Llanquihue, Maullín y Puerto Montt concentraron la mayor cantidad de accidentes y fallecidos en la provincia, siendo las principales causas las actividades recreativas -como el caso de un kayakista en Puerto Varas- imprudencia de los bañistas y descuido de los padres.
En relación al total de llamados recibidas durante el verano al teléfono 137 de emergencias marítimas, se atendieron 313 avisos, de los cuales 46 resultaron ser emergencias reales y un total de 267 falsos, correspondientes al 85,3%.
Ante esta situación, las autoridades resaltaron el llamado a la ciudadanía a darle un buen uso a este medio de alerta y a practicar el autocuidado.
1.800 habitantes tiene aproximadamente la zona cordillerana de Llanada Grande y alrededores en la Comuna de Cochamó.
2015 en el verano ya hubo problemas por falta de agua en el lago, inconveniente que afecta a varios grupos familiares.
85% de las llamadas al número de emergencias marítimas 137 fueron falsas.