Irak: atentado del Estado Islámico en Bagdad deja al menos 125 muertos
COCHE BOMBA. Se trata del ataque terrorista más mortífero que se ha registrado en lo que va del año. El grupo yihadista EI se lo atribuyó y señaló que el objetivo eran los chiíes.
Un atentado suicida con coche bomba llevado a cabo por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en una zona comercial del centro de Bagdad causó la muerte a 125 personas, que es la cifra más elevada de víctimas mortales en un solo ataque registrada este año.
El atentado, ocurrido a las 01.00 hora local de ayer (18.00 horas del sábado en Chile) tuvo lugar en una popular tienda de helados en un distrito donde la población es mayoritariamente chií. Por el verano, y debido al Ramadán, el lugar estaba lleno de gente, porque muchos esperan hasta tarde el "suhur", que es la última comida antes del amanecer.
Otras 135 personas resultaron heridas en el ataque que fue asumido por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en un comunicado firmado por Wilayat Bagdad (provincia de Bagdad) y difundido en las redes sociales. En el texto además indicaron que el objetivo del atentado eran los chiíes.
"En el marco de las permanentes operaciones de seguridad de los soldados del califato en la ciudad de Bagdad, el hermano muyahidín (guerrero santo) Abu Maha al Iraqui logró hacer estallar su coche bomba en una concentración de renegados (chiíes)", manifestaron en el comunicado.
El grupo terrorista advirtió de que "con el permiso de Dios proseguirán los ataques de los muyahidines contra los renegados".
El primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, prometió castigar a "las bandas terroristas que perpetraron el atentado" y mostró su confianza en que "la victoria está muy cerca", en una declaración pública.
La autoridad llegó hasta la zona del atentado pocas horas después de ocurrido, donde ciudadanos le lanzaron piedras y zapatos a la caravana que lo trasladaba, porque lo culpan de no proteger a los civiles de las acciones de los extremistas.
Al Abadi declaró tres días de luto oficial en todo el país para honrar a las víctimas.
Por su parte, el presidente del Parlamento iraquí, Salim Yaburi, condenó en un comunicado estos ataques "criminales y cobardes".
Además, pidió a los servicios de seguridad "tomar precauciones y no dar la oportunidad al terrorismo a que aproveche las circunstancias del país, que libra una guerra contra la organización terrorista Dáesh (acrónimo en árabe del EI)".
Un segundo ataque se produjo en Bagdad en otra zona de población mayoritariamente chií. Otro coche bomba causó la muerte de a cinco personas e hirió a otras 16. Sin embargo, ninguna agrupación terrorista se atribuyó ese atentado.
125 muertos se habían contabilizado ayer del ataque que es el más mortífero de este año.