Por fin, un parlamentario de la zona -el diputado Patricio Vallespín López- toma en cuenta el ferrocarril y se pronuncia con bastante vigor (en su columna en este Diario) a favor de la implementación de un servicio de tren de corto alcance entre Alerce y Puerto Montt, con la opción posterior -ojalá en el mediano plazo- de extenderse a las estaciones de Llanquihue y Frutillar. Lo que hace recordar los planes habidos en torno al funcionamiento del llamado Tren de los Volcanes, en un circuito lacustre. Idea que se ha mantenido por varios años sólo como eso: una posibilidad.
Debe reconocerse que en el largo tiempo de la campaña por la recuperación del tren al sur, liderada por el Centro para el Progreso -con el fallecido Tótila Lintz como emblema de este perseverante batallar-, el respaldo a la cruzada de los congresistas locales se ha hecho notar por su tibieza, fragilidad, feble compromiso y desapasionamiento. En circunstancias que había más de 40 mil puertomontinos que clamaban la reposición ferroviaria Santiago-Puerto Montt, luego de firmar sus adhesiones ante la organización centroprogresista de la capital regional.
Por lo menos, ahora, -gracias a la voluntad y determinación municipal-, aunque sea en un tramo reducido, se reconoce la gran importancia del ferrocarril de pasajeros como indispensable alternativa de transporte terrestre, rápido, seguro y confortable. Pero, sobre todo, no contaminante y sustentable, a la vez que un recurso clave y decisivo para acabar con las congestiones vehiculares, que tanto atormentan a la gente y alteran la normalidad urbana y las responsabilidades ciudadanas de cada día.
Para quienes siguen soñando con el retorno del tren al sur y continúen en esos empeños, surge recomendable no cejar en esas lides. Porque la realidad es cada vez más evidente y los imperativos de alternativas de transporte terrestre irán emergiendo también con mayor urgencia. Tal como ya se ha comprobado en la saturada conectividad entre Alerce y Puerto Montt, donde pronto aparecerá el tren con sus pitazos de esperanza en un proyecto mayor.