Mauricio Mondaca

En uno de los Superclásicos más intensos de los últimos años, Universidad de Chile y Colo Colo no se sacaron distancias luego de firmar un 2-2 que dejó a los universitarios sin poder dar caza a Colo Colo, mientras que el Cacique se quedó sin la posibilidad de liderar momentáneamente el torno e al espera del duelo de Deportes Iquique.

Ante un Nacional con más de 45 mil hinchas, el entretenido duelo tuvo como protagonistas a los porteros de ambos equipos, debido a gruesos errores que significaron un gol por lado. El invicto albo ante su archirrival se extiende a ocho partidos.

El primero

La primera falla llegó por el lado de Paulo Garcés, quien no pudo contener un cabezazo sin nada de violencia de Felipe Mora. El golero quiso atrapar la pelota, pero la perdió de entre las manos y se le fue al fondo del arco. Era el minuto 62 y el 2-1 en favor de los locales en Ñuñoa, que ya se había adelantado en el marcador con tanto de Sebastián Ubilla, quien cabeceó con el al arco desprotegido a los 23' tras una gran jugada de Felipe Mora.

El segundo

Mientras Garcés no atinaba a entender qué había pasado, Octavio Rivero -que había anotado el de la paridad para la visita a los 44' con un tiro rasante que Herrera atinó a mirar- ayudó a descompromir el ambiente entre los albos cuando entró nuevamene al área de la "U" por la izquierda. Le pegó a un balón que parecía fácil, pero la aparatosa estirada de Johnny Herrera no fue suficiente: sus manos dejaron pasar el balón al fondo del arco.

Luego del partido, el entrenador de Colo Colo, Pablo Guede, zanjó de inmediato el tema y entregó su total apoyo a Paulo Garcés.

"Solo queda apoyarlo, entrenar y seguir jugando. Garcés entrena bárbaro, trabaja y es un súper profesional. En el segundo gol nuestro Johnny (Herrera) también falló, y ¿tú crees que él se quiso equivocar? Paulo Garcés seguirá atajando", afirmó en la conferencia de prensa posterior al juego.

Lamento azul

En el camarín de la "U" el ambiente era de pesar por haber estado en dos oportunidades sobre Colo Colo en el marcador. "Fue una jugada desafortunada de mi parte. Un accidente en el fútbol que ni siquiera entrenando en mi vida me había pasado", aseguró el golero. Herrera agregó que tras su equivocación el partido lo pudieron perder y que debido al desgaste de los tres partidos anteriores terminaron con una sensación de amargura.

Hoyos, emocionado

"Quiero agradecerles el esfuerzo, la garra, el deseo. Cuando hay un derroche de esa forma, más allá de cualquier posibilidad de pase o centro, es un honor estar al frente de la dirección técnica de ellos", dijo un emocionado Ángel Hoyos tras dirigir su primer derby.

El DT elogió la entrega de su equipo, a pesar de una semana en que regresaron de Brasil con un aderrota ante Corinthians: "A veces las piernas no respondían por todas las exigencias de una semana muy dura".

Pese a su doblete, el uruguayo Octavio Rivero dijo estar "caliente" por la inmejorable oportunidad que perdió cuando el partido terminaba, y que pudo significar el triunfo de Colo Colo. Rivero valoró el punto obtenido ya que "si ves el marcador, estuvimos abajo todo el partido".

Los albos en espera

Por ahora los albos se quedan con 18 puntos como líderes al igual que Deportes Iquique, aunque los nortinos podían mejorar su ubicación al visitar ayer a Everton en el Sausalito de Viña del Mar.

Sobre las aspiraciones al título, Guede afirmó que "están más altas que nunca".

"Estamos ahí, debemos esperar el Iquique-Everton (de ayer). Si gana Iquique debemos remarla más que nunca", agregó el DT de los albos.