Desde la tarde del jueves que en varios estados de Venezuela se están llevando a cabo diversos ejercicios militares, los que según Nicolás Maduro son para hacer frente a la "amenaza imperial" de Estados Unidos. Y ayer, el jefe del Comando Estratégico Operacional de las Fuerzas Armadas, Remigio Ceballos, aseguró que los ensayos se intensificarán durante el fin de semana y que participarán 900 mil "combatientes".
"Nosotros vamos a participar (...) más de 200.000 efectivos militares específicamente en las actividades del ejercicio en sí, pero además de eso hay que incrementar allí la milicia", más "los cuerpos combatientes y todo el pueblo organizado" y el cálculo ya "alcanza más de 900.000 combatientes", dijo Ceballos.
La milicia en Venezuela es un cuerpo a disposición de las Fuerzas Armadas compuesto por civiles, creado por decreto por el fallecido Presidente Hugo Chávez en 2007, y en el cual puede inscribirse cualquier persona.
Según detalló Ceballos, desde el pasado 14 de agosto -fecha en la que Maduro ordenó los ejercicios militares- la cantidad de inscritos en la milicia se ha ido incrementando, algo que consideró que se debe al "sentimiento patrio" y por ello no descarta que aumente la cifra de los 900.000 combatientes que participarán.
Con respecto al ejercicio militar, este se dividirá en dos "momentos". Hoy es el día de los llamamientos de registro, de "la puesta en completo apresto (disposición) y actividades de adiestramiento". Mañana, en tanto, se realizarán las "acciones tácticas" y "el empleo de todos los medios", según explicó el jefe militar.
Durante las prácticas se ejecutarán "ejercicios de fuerzas de acción especial" y "con fuerzas de acción rápida", agregó Ceballos, quien ofreció estas declaraciones acompañado también por "agregados militares de Belarús, Bolivia, China, Cuba, Vietnam, Rusia", a quienes aprovechó de agradecer por estar en Venezuela.
Nuevas sanciones
En Estados Unidos, en tanto, Donald Trump firmó un decreto que impone más sanciones en contra del Gobierno de Maduro. La Casa Blanca emitió un comunicado en el que señala que quedan prohibidas las "negociaciones en deuda nueva y capital emitidas por el Gobierno de Venezuela y su compañía petrolera estatal (Petróleos de Venezuela)".
La medida prohíbe también las "negociaciones con ciertos bonos existentes del sector público venezolano, así como pagos de dividendos al Gobierno de Venezuela".
Según el mismo comunicado, estas nuevas acciones "están calibradas cuidadosamente para retirarle a la dictadura de Maduro una fuente crucial de financiación para mantener su régimen ilegítimo, proteger al sistema financiero estadounidense de la complicidad con la corrupción de Venezuela y el empobrecimiento del pueblo venezolano y permitir la ayuda humanitaria".
Por lo mismo, "para mitigar el daño al pueblo estadounidense y venezolano, el Departamento del Tesoro emitirá licencias generales que permiten transacciones que de otra manera estarían prohibidas por la orden ejecutiva", agrega.
Poco antes de este anuncio, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, dijo a través de Twitter que su Gobierno no se quedará "de brazos cruzados mientras Venezuela se desmorona". En el mismo mensaje agregó que "el derecho natural del pueblo de Venezuela ha sido y será siempre la libertad", escribiendo "libertad" en español.
Ante estas nuevas sanciones, la presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Delcy Rodríguez, culpó a la oposición. "Han pedido la intervención del país, han pedido sanciones financieras y su amo imperial les está dando ese regalo que es perjudicar al pueblo de Venezuela", dijo refiriéndose a los líderes disidentes.
de agosto. En esa fecha, Maduro ordenó la realización de los ejercicios militares, que comenzaron el jueves. 14