Arquitectos advirtieron lo riesgoso que era construir pasarelas con madera
ROTONDA. Circulación vehicular permanece con restricción y desmantelamiento de la estructura más dañada demorará una semana. Subsecretario de Obras Públicas aseguró conectividad.
En 2005 los profesionales del Colegio de Arquitectos provincial Llanquihue, advirtieron al Ministerio de Obras Públicas (MOP) lo inconveniente que resultaba construir las pasarelas con madera laminada, en la naciente rotonda de acceso a Puerto Montt; obras que también fueron fuertemente cuestionadas.
Han pasado 11 años de esa advertencia y hoy se observan tres enormes grúas dando seguridad a las estructuras que comenzaron a ser desmanteladas por la Dirección de Vialidad.
Los arquitectos puertomontinos, a casi una década de construida la rotonda, fueron coincidentes en la incorrecta decisión de usar madera y en la falta de mantención.
El martes, apenas se conoció el grave problema de deterioro de las vigas de las tres pasarelas, arribó a la capital regional el subsecretario de Obras Públicas, Sergio Galilea, quien aseguró conectividad para los cientos de peatones que utilizan estas estructuras para trasladarse a diferentes puntos del sector alto.
Ayer, los profesionales de Vialidad comenzaron a desarmar la pasarela "Pargua", trabajos que podrían estar concluidos en cinco días.
La zona está con el tránsito vehicular restringido y supervisión de Carabineros de la Quinta Comisaría, para evitar dificultades. Sin embargo, la congestión que se ha incrementado en esta zona, producto de los trabajos.
Madera
Marcelo Vera, académico y ex presidente del Colegio de Arquitectos, recordó las observaciones hechas en 2005 a las pasarelas del acceso norte.
La advertencia se efectuó al Ministerio de Obras Públicas en el marco de una muestra de arquitectura local, realizada en el recinto portuario.
"Esa actividad consideró tres charlas y se invitó al MOP a exponer. Se habló de las pasarelas y se solicitó a la instancia que mostrara el diseño de dicha estructura. Accedieron, pero al final no se exhibió y nunca se concertó una reunión. Nosotros, como colegio (de arquitectos), dijimos que las rotondas estaban obsoletas y que las pasarelas, y todo el lugar, tenía elementos complejos, como la madera laminada", rememoró.
Vera manifestó que en esa etapa dieron a conocer lo inconveniente que era hacer esta obra con madera. Y apuntó que nunca se concretó una reunión con las autoridades del MOP de esa época.
El académico agregó que hace ocho años, cuando era director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad San Sebastián y junto a Corma (Corporación Nacional de la Madera), se hizo un seminario asociado al tema de la utilización de este material en el sur de Chile. Para ello trajeron especialistas asociados, específicamente a la madera laminada.
"Allí se dijo que las pasarelas iban a presentar problemas, por la presencia de madera laminada, porque no es la correcta, y las soluciones constructivas no eran las acertadas. Ello estaba asociado a las vigas y sus fundaciones, allí se producen puntos húmedos que terminan por deteriorar la madera, que en el fondo fue lo que ocurrió", expresó.
Prolija
El arquitecto Marcelo Jiménez, también de la capital regional, fue coincidente con su colega Vera, en el sentido que ello fue advertido en su etapa y el tiempo les terminó por dar la razón.
"Las estructuras colapsaron, por una mala decisión de los elementos utilizados, porque el sistema de marco laminado no es para el exterior", anotó. Para Jiménez, se trató de una mala determinación técnica, pero además consideró que cuando se levantan estas estructuras con madera, "debe tener una adecuada y prolija mantención".
"La madera laminada no soporta en el exterior en ninguna parte del mundo. Obviamente no es para diseñar estructuras soportantes exteriores , a la intemperie, por lo que no fue la mejor decisión", aseveró.
Para el arquitecto Fernando Gunckel, la madera laminada en condiciones interiores funciona, pero con formas especiales. Para el profesional, fue muy temeraria la construcción de las pasarelas. Para este tipo de estructuras, el material indicado sería el hormigón o el acero.
"El hecho que también puede afectar las pasarelas es que la rotonda es un lugar muy contaminado, porque transita mucho camión, buses y todo tipo de vehículos. La vibración del terreno podría haber ayudado al deterioro de las estructuras", apuntó.