Aprovechando las condiciones de baja marea un equipo técnico de la Empresa Ardent de Holanda dio inicio la mañana de ayer en el sector de Pilpilehue, comuna de Chonchi, a los trabajos de intervención en el casco del wellboat Seikongen para extraer las 200 toneladas de salmones en descomposición, tras el hundimiento de la nave hace 17 días.
Las maniobras que son supervisadas por la Armada de Chile permitieron a los expertos intervenir el área de la nave donde se habilitará una escotilla que funcionará como vía de evacuación o succión de la masa orgánica que irá a parar a un camión estanque sellado para su retiro definitivo.
El complejo trabajo que forma parte del plan de extracción elaborado por CPT Empresas Marítimas fue detallado el día anterior por el intendente regional, Leonardo de la Prida, quien expuso a los habitantes aledaños el procedimiento de toda la operación para extraer tanto el volumen de masa orgánica como los 60 mil litros de combustible.
Héctor Aravena, gobernador marítimo de Castro, mencionó que el primer paso consistió en realizar una inducción o charlas de preparación para todo el personal que operará en el navío, el cual debido al bajo nivel del mar quedó mayormente expuesto permitiendo a los operarios y funcionarios navales posesionarse en el buque.
"Llegaron y cumplieron con todo el protocolo de inducción de seguridad, llegaron con los equipamientos, con la escotilla que quieren trabajar, están en esa fase, ellos todavía están en ese proceso solamente de instalación sobre el casco", dijo el uniformado.
El oficial de marina manifestó que todas las maniobras han sido observadas por el personal de la Gobernación Marítima de Castro, mientras el grupo técnico y humano de la empresa mandatada realiza la intervención en el buque.
A este respecto, el uniformado explicó que "están con nuestra gente, que está haciendo las mediciones de gases, las muestras que hay que hacer con los buzos, está allí nuestra gente pendiente".
En relación a los primeros trabajos y las expectativas que ha generado en la comunidad de Pilpilehue, fue la propia líder indígena, Patricia Cárdenas, quien constató la presencia de los equipos especializados en la zona del hundimiento. La dirigenta señaló que "a las seis de la mañana está mar bajo, me levanté a esa hora y vi que ya estaban allí en las maniobras de trabajos. Ahora a esperar que no pase nada".
Etapas
Tres fases claramente establecidas considera el plan de extracción de la carga que llevaba el barco Seikongen al momento de su hundimiento el 18 de octubre pasado.
Es así que el propio intendente regional, Leonardo de la Prida, recordó el comienzo de los trabajos que la empresa dueña del navío procederá a extraer los residuos salmoneros para dar paso más tarde al retiro del combustible y finalmente al rescate de la embarcación. De la Prida fue enfático en señalar cuál será el destino de la carga en descomposición.
"Desde la orilla van a ser transportados o directamente en barco o en estos contenedores herméticos a un lugar de depósito final", aseveró el representante político, añadiendo que "se determinará según los análisis que hagamos a la masa". Como contraparte a las faenas extractivas las comunidades costeras de Chonchi se han adherido con la presentación de diferentes acciones de carácter legal, por lo que ellos consideran la existencia de un daño de carácter ambiental.
Uno de los grupos demandantes pertenece a la localidad de Terao, quienes la mañana de ayer ingresaron un recurso de protección a la Corte de Apelaciones de Puerto Montt. La noche anterior el documento fue avalado con la firma de dirigentes o representantes de esta comunidad rural.