75 por ciento de daños en Liceo Ignacio Carrera Pinto tras siniestro ayer en Frutillar
600 ALUMNOS. Autoridades comprometieron respaldo para reparar el establecimiento. Origen y causas se investigan.
Por más de una hora y media los Bomberos de Frutillar debieron trabajar ayer en la tarde en la extinción del siniestro que provocó cuantiosas pérdidas en el Liceo Ignacio Carrera Pinto y que por momento se tornó incontrolable.
De acuerdo a la apreciación preliminar de Bomberos, los daños alcanzaron aproximadamente el 75 por ciento del recinto educacional, de construcción de madera y alrededor 400 metros cuadrados.
En el liceo frutillarino se habían realizado trabajos de mejoramiento por una inversión aproximada a los 250 millones de pesos, obras que aún no eran recepcionadas por la Municipalidad.
La emergencia fue declarada alrededor de las 16.20 horas y concurrieron todas las compañías de Bomberos de Frutillar, con apoyo de los voluntarios de Casma, quienes debieron redoblar sus esfuerzos para controlar las llamas, cerca de las 18 horas.
En el siniestro no hubo personas lesionadas y los funcionarios del Liceo y vecinos intentaron recuperar la mayor cantidad de especies y muebles.
Son aproximadamente 600 los alumnos que se vieron afectados por esta emergencia, 500 que estudian de primero a cuarto medio y alrededor de 100 que corresponden a la jornada nocturna de adultos.
El alcalde de Frutillar, Claus Lindemann, manifestó su esperanza que el establecimiento pueda ser reparado con prontitud.
De acuerdo a Bomberos, hubo propagación en todo el entretecho. que no alcanzó el gimnasio, y de acuerdo a información preliminar, el siniestro habría tenido su origen en la caldera, sumado a la situación eléctrica, que deberá ser indagado oportunamente.
Recepción
Luis Tejos, jefe del Departamento de Administración de Educación Municipal (Daem) de Frutillar, precisó que las obras de remodelación del liceo aún no habían sido recepcionadas por el municipio.
"Los trabajos consistieron en la reposición de la red eléctrica, cambio de ventanales, puertas, pintura y el cambio de algunos radiadores de calefacción. La recepción de los trabajos estaba prevista para la próxima semana", manifestó la autoridad educacional de Frutillar.
Debido a la emergencia, en el lugar se constituyó el intendente Harry Jürgensen, quien comprometió todo el respaldo para la comunidad educativa.
"Felizmente hay una solución de mitigación, que el alcalde Claus Lindemann lo tiene presente. Postergar un poco la construcción del colegio Alessandri y ocupar lo que estaban reservando para mitigar esas obras y aplicar en este liceo para que se pierda el mínimo de clases y tratar de levantar rápidamente un proyecto", anotó.
De acuerdo a la autoridad regional, se generará el apoyo de la zona para que tengan financiamiento adecuado, "claro, se demora, no es de inmediato, pero la voluntad de todas las autoridades es reponerlo a la brevedad", acotó.