Como un proceso arduo y laborioso calificó Leopoldo Oyaneder, director del Hospital de Fresia, el trabajo que se desarrolló para obtener la tan anhelada acreditación durante tres años en Calidad y Seguridad del Paciente, ante la Superintendencia de Salud.
La titánica tarea para obtener el reconocimiento, según Oyaneder, fue en primera instancia gracias a un equipo multidisciplinario de ocho personas, pero que después involucró a todos los funcionarios que trabajan en el recinto.
Características
"La entidad que nos acreditó fue Asegura SpA y constató en terreno protocolos de evacuación o de emergencia, seguridad de las instalaciones, identificación de los pacientes y la fidelidad de nuestra ficha clínica, procesos de compra de equipamientos, entre otros. Tuvimos que cumplir 47 características", detalló Oyaneder sobre algunos de los requisitos que tuvieron que presentar.
El directivo destacó que el Hospital de Fresia es el único en la Provincia de Llanquihue, que cuenta con atención cerrada y además es prestador urbano de Atención Abierta de la comuna (APS). "En la comuna no hay Cesfam ni Cecosf. Nosotros realizamos un trabajo propio de la atención primaria", aclaró.
Y describió: "Realizamos atención abierta de morbilidad médica, ejecución de programas de pacientes crónicos; tenemos telemedicina, atención en el área de salud mental con los centros de integración y contamos con un equipo de visitas domiciliarias, entre otras características". En cuanto a la relevancia del logro, Oyaneder manifestó que "nos coloca un sello de excelencia en nuestro quehacer a nivel de procesos que mejoran la calidad de atención y también la seguridad de las prestaciones que otorgamos. Esto llevado a la práctica eleva nuestro estándar".
Complementó: "Instala un proceso de mejora continua, porque la exigencia que nos solicitaron para acreditarnos por primera vez es de un 50% del total de características y para reacreditarnos tenemos que llegar mínimo a un 70%".
La cabeza del centro de salud también indicó que tienen como desafío convertirse en un hospital comunitario, que aplique el modelo de salud familiar. Además, recalcó que tienen aún pendiente remodelar la infraestructura del área de alimentación.
"Y poder superar las brecha de recursos humanos con que cuenta el hospital, porque aún existe un déficit de kinesiólogo, enfermería en urgencia y hospitalizados, falta de horas de psicólogo", enfatizó Oyaneder. En la actualidad, se han llevado a cabo diversas medidas, como, por ejemplo, que desde el mes de julio el Servicio de Urgencia cuenta con un nuevo técnico paramédico y un enfermero más (ver cuadro), para mejorar la atención de los pacientes, disminuir los tiempos de espera.