Marcelo Galindo Gallardo
Hasta en la basura, los peritos del Laboratorio de Criminalística (Labocar) de Carabineros buscaron las prendas de vestir de una mujer de 58 años que llegó con graves quemaduras a la unidad de Urgencia del Hospital de Puerto Montt, producto de un incendio que destruyó el inmueble que habitaba en la zona rural de Parga, en Fresia.
El Ministerio Público dispuso que sea el Labocar la unidad indague las causas del siniestro, pero al llegar al lugar de la emergencia se percataron que estaba todo carbonizado, producto del rápido avance de las llamas en la pequeña casa de madera.
Los peritos fueron al Hospital de Puerto Montt a buscar la ropa de la víctima, pero se encontraron con que esta importante prueba había sido arrojada a la basura.
Para los funcionarios policiales es vital contar con este tipo de evidencia, debido a que la principal versión entregada por la pareja de la mujer lesionada, indica que ésta habría amenazado que se iba arrojar algún tipo de combustible y que además prendería un fósforo.
El Llanquihue intentó ayer obtener una versión del Hospital respecto a la pérdida de la ropa de la mujer. Al cierre de esta edición, aún no existía una respuesta.
Prueba
De acuerdo al fiscal jefe de Puerto Montt, Marcello Sambuceti, existen instrucciones generales y permanentes que la Fiscalía ha dado a todas las instituciones que forman parte de la red del Servicio de Salud, incluidos Centros de Atención Primaria como hospitales, "que en los casos de hechos que son constitutivos de delito, es imprescindible custodiar los medios de prueba, como son las vestimentas".
Para Sambuceti, resulta muy importante resguardar no sólo el sitio del suceso, sino que también todo lo que puede significar un elemento probatorio para la investigación.
"Es extraordinariamente importante para esclarecer un delito, ya que pueden ser la prueba clave de un hecho como en el caso de restos biológicos o marcas de un arma homicida. Lamentablemente, hemos tenido reporte de algunos casos, en que el Servicio de Salud no ha adoptado las medidas adecuadas para el resguardo de las vestimentas, lo que no sólo incumple un protocolo importante de trabajo, sino va en desmedro de las propias víctimas de los delitos", aseguró.
Eliminadas
Para el abogado Juan Cristóbal Grünwald, de lo que se observa del caso ocurrido en Fresia, se desprende claramente una inobservancia a las normas que se refieren a la conservación de las especies, lo que está regulado en el Código Procesal Penal.
"Se trata de especies que al ser recogidas en la investigación, deben ser conservadas bajo la custodia del Ministerio Público, que debe adoptar las medidas necesarias. Ante la ocurrencia de este hecho, se tendría que ver cuál fue la descoordinación que se pudo haber registrado", indicó.
Grünwald añadió que se puede hacer un reclamo ante el juez de garantía, pero en este caso las especies ya no se conservaron y fueron eliminadas, "lo que perjudica la investigación, porque se va a contar con un elemento menos de prueba", adujo.
El abogado Andrés Martínez explicó que estos procedimientos están reglamentados en los sistemas de salud.
Dijo que se trata de protocolos que indican que ningún objeto, que sea de la víctima o de cualquier persona que haya participado en un supuesto delito, puede ser eliminado.
"Lo que pasó con el incendio es que pudo ocurrir un problema en la cadena de custodia, pero es un error importante", puntualizó.
Según Martínez, en el caso de los delitos sexuales, se incauta todo lo que pudiese estar ligado al ilícito, incluso algunos restos orgánicos botados en los papeleros. Eso, más las prendas de vestir, pueden ser ligados para establecer culpabilidad de las personas en los delitos sexuales.
"La medicina forense está regulada desde fines del siglo XIX y llevamos más de 100 años donde se han establecido protocolos y claramente las ropas de las víctimas deben mantener una cadena de custodia", argumentó.