El pasado 10 de octubre, la Policía de Investigaciones inauguró el primer Centro de Entrevista Investigativa Videograbada en Chile, marcando con ello un hito a nivel nacional respecto a la atención de víctimas o testigos de delitos graves contempladas en la Ley 21.057, entre ellos niños y adolescentes, con la idea de disminuir los efectos negativos producidos por la victimización secundaria.

Se trata de una iniciativa que apunta a la estandarización de los procedimientos de acuerdo a criterios internacionales, con el objetivo de aumentar a su vez los estándares de calidad del trabajo investigativo que desarrolla la PDI mediante sus Brigadas de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme). Como institución, somos pioneros a nivel sudamericano en implementar un centro con cómodas dependencias de atención según la edad y etapa evolutiva de los menores, especialmente acondicionadas para la protección de la privacidad, seguridad y control mediante un circuito cerrado de televisión. Sumado a ello, también cuenta con un área destinada a la formación académica de profesionales entrevistadores para su perfeccionamiento, reentrenamiento y evaluación continua, para desarrollar una labor óptima. Mediante el equipamiento tecnológico y la nueva infraestructura, se podrá aislar el sonido externo, captando de mejor manera el lenguaje verbal y no verbal de los concurrentes a nuestras salas. Cabe destacar que la entrevista videograbada es fundamental no sólo para la Policía de Investigaciones, sino que también para fiscales y jueces, quienes podrán tener acceso a estos registros con el fin de desarrollar un trabajo mancomunado.

Si bien dichas salas fueron inauguradas en Santiago, se estima que en 2021 la Región de Los Lagos contaría con un centro de estas características mediante su tercera etapa de implementación.

Estas nuevas herramientas que ponemos a disposición de la ciudadanía nos permitirán continuar por la senda del desarrollo y crecimiento investigativo, teniendo como único fin la protección de la dignidad de nuestros niños y adolescentes.

Prefecto Luis Bevilacqua.

Jefe regional (s) de la PDI en Los Lagos.

Este 2019 puede ser un buen año para Deportes Puerto Montt, en general. Por lo menos, con el aporte que le corresponde por la venta del Canal del Fútbol (CDF), no enfrentará la incertidumbre, inestabilidad y los padecimientos, que implica la falta de dinero para llevar adelante sus campañas en el fútbol profesional, anhelando siempre volver a la primera división.

Lo primordial es que -en la dirigencia del club porteño- sobresale la convicción de invertir de la mejor forma posible esos nuevos recursos, pensando en el porvenir de la institución y en el semillero de jugadores que representan justamente ese futuro. El que bien puede ser próspero, si se trabaja con seriedad, prudencia, dedicación, generosidad y mentalidad visionaria.

En ese marco, acabamos de conocer que un proyecto de la institución albiverde, que se basa en esos planes vanguardistas y que fuera presentado al Ministerio de Bienes Nacionales, a través de la Seremi Regional, fue aprobado. Lo que significa que -en el sector de Alerce- la entidad que actualmente preside Germán Mayorga, podrá habilitar el soñado complejo deportivo que tanto se necesita. Se trata de cuatro hectáreas de terreno alercino, donde será posible emplazar las canchas para las series menores y la rama femenina de Deportes Puerto Montt, que mucho se requieren para impulsar y consolidar la formación futbolística de los futuros defensores de la casaquilla puertomontina, tanto en damas como en varones, así como también en otras disciplinas deportivas y eventos sociales en bien del club.

Sería -¿por qué no?- la oportunidad de hacer realidad la antigua aspiración de la "Ciudad Deportiva", encabezada por el club puertomontino, que ya entera los 36 años de pujante y progresista trayectoria en la capital de la Región de Los Lagos. Una ciudad deportiva que ya ha estado -sin concretarse- en los planes de administraciones comunales pasadas, que han pensado en la urgencia de dar más oportunidades deportivas a la juventud, acosada por las dañinas lacras sociales imperantes.