Si bien las redes sociales como Facebook o Twitter nacieron para el intercambio de información, realizar actividades en común o facilitar el encuentro de amigos y familiares, hoy son mal utilizados, lo que genera preocupación en los organismo de emergencia local.

Marcelo Millar, comandante de Bomberos de Osorno, ve con preocupación el tema, ya que han constatado con asombro que los últimos incendios registrados en lo que va del año en Osorno, han sido grabados desde sus inicios y subidos a las redes sociales por vecinos y transeúntes, sin que pidan primero la ayuda oportuna para controlar las emergencias.

"Es una situación que nos preocupa y que se registra desde hace bastante tiempo. Lo grave es que la gente se pone a grabar y no llama a bomberos. Es un tema repetitivo y ha originado, en diversas ocasiones, demora para acudir a controlar los siniestros", comentó.

Millar explicó que cuando las personas -vecinos y espectadores- no avisan de manera oportuna sobre un incendio o accidente, los voluntarios se encuentran con un trabajo complejo, que podría pasar a mayores incluso.

La autoridad citó el hecho sucedido la noche del 19 de noviembre del año pasado, en el incendio de calle Santiago con Iquique, en Rahue Bajo, cuya alarma fue dada por el un oficial bomberil que pasaba por el lugar, que advirtió a distancia cómo la centenaria construcción era afectada por el fuego.

"El capitán de la Octava Compañía dejó estacionado su vehículo unos metros antes de la vivienda y al aproximarse vio cómo la parte posterior ya estaba ardiendo. Tomó su radio y emitió la alarma de incendio. El oficial se llevó una gran sorpresa al ver que un grupo de personas estaba en el lugar grabando el siniestro con sus teléfonos celulares, sin que nadie llamara al 132 para avisar de la emergencia", recordó Marcelo Millar.

Víctimas fatales

Bomberos de Osorno ha trabajado en cuatro incendios declarados en sólo 25 días de este mes. Uno fue en la población Maximiliano Kolbe; otros en Rahue Alto (calle Walterio Meyer); en la población Alday (calle Alessandri) y el miércoles pasado en la calle Chillán en Rahue Bajo.

En dos de ellos hubo víctimas fatales, sin embargo, los voluntarios vieron que las imágenes de las emergencias, grabadas incluso desde el principio, estaban circulando en las redes sociales y en varias se observa que hay personas pidiendo llamar a los bomberos. Los minutos de grabación dejan en evidencia que aquellos "espectadores", pese a la suplica desesperada de los vecinos, no detuvieron la filmación ni tampoco actuaron para controlar el fuego.

"No se puede prohibir que graben, pero al menos deben avisar primero a los bomberos, para así evitar tragedias que lamentar", dijo Millar.

Eliana Catrilef, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Osorno, se sumó al cuestionamiento que hizo bomberos y manifestó que se ha perdido la solidaridad de la población.

"Después la gente en las mismas redes sociales critica a los bomberos por llegar tarde. La gente perdió la sensibilidad y se han transformado en verdaderos 'cazanoticias'. No entiendo cuál es el fin de grabar y subir las imágenes a las redes sociales. Esperamos que esta campaña que inició bomberos tenga sus efectos y haya más solidaridad de la población. Que llamen al número 132 para avisar de los incendios antes que ponerse a grabar", indicó la dirigenta.

El tan ansiado "LIKE"

Humberto Marín, doctor en Sicología Social (PhD), especialista en Seguridad, Emergencias y Desastres, señaló a El Austral de Osorno que cuando el peligro no nos afecta de manera directa, nuestro cerebro trabaja sobre varias hipótesis.

"Una de las principales razones para no actuar, es la difusión de la responsabilidad, ya que el grupo espera que otro miembro actúe. En ocasiones, esa responsabilidad se delega en un agente policial o de seguridad para que tome el asunto y sus consecuencias por voluntad propia. Además, podemos señalar que otro aspecto es la falta de educación sobre qué hacer durante los primeros minutos de una emergencia. Ahora, también es entendible que con las redes sociales hay quienes buscan aumentar sus visitas y poder obtener más 'like' o 'me gusta' a las imágenes o videos que subieron, como una forma de sentirse más populares", comentó.

Buen uso del 132

Otra realidad que preocupa a bomberos, es que del 100% de las llamadas de emergencia que reciben en el 132, el 70% proviene de otra institución, que es Carabineros. El 30% restante viene de la comunidad.

"El mayor número de alertas proviene de carabineros. El año 2018 tuvimos más de mil 850 llamados, de los cuales el 70% fue por la información que recibió Carabineros, el restante 30% fue por llamadas directas al 132. Muchas veces los llaman a ellos y deben dejar procedimientos para verificar si es real o no el llamando de incendio. De 100 llamados recibidos en nuestra central, el 10 por ciento es para reportar emergencias reales, el restante 90% corresponde a consultas ajenas a nuestra labor", detalló.

Bomberos habilitó una frecuencia radial que mantiene conectado al ABC de la emergencia y ha permitido una respuesta rápida.

"Desde hace un tiempo, el Servicio de Atención Médica de Urgencia (Samu), Carabineros y Bomberos disponemos de una frecuencia interna donde se canalizan las emergencia y coordinan los servicios. Ello ha permitido trabajar en conjunto y ofrecer una respuesta rápida a las personas que están implicadas en los incidentes", señaló el comandante bomberil de Osorno.

El subprefecto de los Servicios de Carabineros de Osorno, mayor Miguel Herrera, dijo que "es un fenómeno donde importa más la información que la cooperación a las víctimas. Se está perdiendo la capacidad de ayudar al prójimo. En cuanto al llamado de emergencia, pasa muchas veces porque la gente conoce más el 133, que ya es un número histórico".

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