Osorno
La Constitución tiene como una de sus finalidades, establecer el marco de reglas que mantengan y respeten los derechos de los ciudadanos. Por lo mismo, podemos aseverar que el Estado existe para hacer respetar estos derechos y asegurar las leyes que cumplan este objetivo. Por lo tanto, es el órgano supremo que tiene el poder para salvaguardar los derechos de los chilenos. Cuando vemos un Estado proteccionista que nos regula y controla la cantidad de alcohol, de grasas, de tabaco y otras sustancias. Que controla el horario de funcionamiento de una botillería, o el horario para que un menor de edad circule como todo ciudadano libre por las calles de su país; creo es necesario velar por la regulación y el control de un elemento vital para el ser humano como es el agua. Lo que ha ocurrido en Osorno es incomprensible y demuestra la incapacidad de una empresa por administrar un recurso que es chileno, que proviene de la naturaleza y que jamás debería haberse privatizado. El abastecimiento de agua debe ser asegurado y administrado por el Estado, por un Estado protector de los derechos de sus ciudadanos.
¿Cómo la empresa Essal propone una compensación con dos meses en los cuales no va a cobrar el suministro, cuando aún no termina la compleja situación que afecta a los osorninos?
¿Cómo las autoridades permiten estos abusos con quienes no tienen la capacidad económica para trasladarse de ciudad durante la emergencia, o no tienen el vehículo o en el caso de ancianos de no tener la capacidad física para acarrear bidones con el vital elemento para ir a buscar agua a un estanque? Si, estas mismas personas que tienen que seguir trabajando, para no sufrir descuentos. Estas mismas personas, que no tienen la capacidad económica para contratar un abogado y demandar este tremendo abuso.
¿Cuántas veces se tendrá que repetir esta situación para que el Estado asuma el control del agua potable y la energía eléctrica? La respuesta es incierta, más aún cuando ministros de Estado (vigentes o no) tienen en sus declaraciones de intereses y patrimonio, participación en empresas relacionadas. En resumen, los "ciudadanos de a pie" debemos seguir lo señalado por jinetes que van montados en sus caballos de ministros, intendentes, y políticos.
FERNANDO RETAMAL AVILÉS.
Ley JibiaMiles de puestos de trabajo dependen de que prorrogue la entrada en vigencia de la Ley Jibia, que es una mala ley que se aprobó por razones mezquinas en el Congreso y que a esta altura del año se está empezando a ver las malas consecuencias que traerá para los trabajadores y para el país.
En el caso de esta ley, confluyeron dos factores que al juntarse no salió nada bueno: por una parte, la ambición de un grupo de intermediarios artesanales y por otra, el rencor del Parlamento hacia la estigmatizada industria pesquera (por errores cometidos en conjunto en la pasada ley de pesca). Afortunadamente, un grupo de parlamentarios de diferentes bancadas ya se han dado cuenta del daño que esta normativa provocará y está apoyando la moción para aplazar la entrada en vigencia de la ley.
En un hecho inédito, Trabajadores Pesqueros Industriales y Artesanales de Cerco nos encontramos luchando codo a codo, para hacer entender a las autoridades de Gobierno, Congreso y también a la opinión pública, que con esta ley son miles las familias que se verán afectadas; familias como tantas de este país que necesitan de un sueldo para pasar el mes. Por favor, entiendan de una vez que somos jefas y jefes de hogar que no queremos perder los puestos de trabajo dignos con los que hoy contamos.
RICARDO FLORES ZÁRATE. Presidente Sindicato Tripulantes de Barcos de Arrastre.
Cuaternidad culturaPodría decirse que el siglo I de la Era Cristiana estuvo configurado por la coexistencia de cuatro potencias culturales de antiguo origen, con miras a un superior desarrollo de esas mismas potencialidades humanas: el derecho romano, la filosofía griega, la religión escritural del judaismo y el emergente cristianismo. De este último, diría Ortega y Gasset algo como esto: "No fueron los generales de poderosos Imperios, ni los filósofos de grandes culturas, los que canalizaron la esencia de las antiguas civilizaciones hacia el surgimiento de la civilización occidental, sino las Iglesias Locales fundadas por San Pablo en el mundo greco-romano". Y respecto a uno de los trágicos aconteceres de esta civilización, alguien reflexionó: "Europa se suicidó cuando mató a sus judíos" (6 millones, Segunda Guerra Mundial). Parafraseando aquello, tal vez, también podría decirse: "Chile retrasó su marcha histórica civilizada cuando encerró en reducciones y abandonó a sus mapuches". Pero aquellas mismas antiguas potencialidades humanas: derecho, filosofía, religión escritural y fe cristiana, siguen vigentes y, por lo mismo, están a la mano para reencauzar la marcha histórica de Chile en orden a la presente civilización ya universal.
SERGIO LIEMPI MARÍN.
