Bronko Yotte abre su 2020 con EP realizado en tiempo récord
MÚSICA. El artista acaba de lanzar "Deli", que contiene cinco canciones que compuso en cinco días en Nueva York.
Amelia Carvallo
En una breve estadía en Nueva York, Bronko Yotte compuso "Deli", un EP que contiene cinco canciones y que fueron grabadas en tiempo récord.
"Quería hacer un disco en pocos días", dice Felipe Berríos, nombre de civil del compositor, debido a "la necesidad que tiene que ver más con Chile. Estaba un poco abrumado. Quizás un poco bajoneado, por el correlato del liberalismo en el ejercicio de la música y del arte independiente".
-¿Por qué le pusiste Deli al disco? Esta dentro de una frase de "Swerte". ¿Es algo así como un lugar del barrio?
-Claro, los locales de venta de comida preparada. Lugares muy sociales que tienen un gesto muy barrial: se conversa, se juntan afuera todas las noches, me parece muy inspirador y conecta en algo con nuestra idiosincracia.
-"Swerte" es quizás la canción más declarativa con eso de "Haz tu suerte, hazte fuerte"
-Claro, a diferencia de las otras cuatro es la que propone una salida a esta situación tan alienada. Volcarse a la calle no solo como un lugar de paso, volver a ser familia entre vecinos, hacer comunidad, perder el miedo, abrir la reja. Siento que eso no se ha borrado completamente de nuestra identidad. Muestra de ello fue este Año Nuevo que se celebró en Plaza de la Dignidad.
-La canción que resulta más críptica fue "Hush Papi", ¿de qué va?
-Habla de cierta vorágine que tiene una concepción del trabajo actual, que se considera normal y correcto aunque sea desgastante y alienado, en condiciones precarias para lo camiseteados que nos piden estar. Sin criticar a quienes trabajan de esa forma, la idea es solidarizar porque yo también lo he vivido.
-Cierras el EP con S.O.P. ("Sin otro particular") que es uno de los temas más íntimos, quizás.
-Creo que es la que recoge de manera más pura esa sensación de desazón. Utilizo recursos como repetir sin justificación ciertos versos, o ciertas ideas que están premeditadamente inconexas. Es la parla de alguien que va como reflexionando en estos viajes larguísimos que se pegan muchos santiaguinos en micro, harto abatimiento y cansancio.
-¿Qué sampleos sacaste de las visitas a disquerías?
-Tenía poco tiempo para sumergirme como hubiera querido. De hecho al día siguiente que llegamos altiro estábamos en las disquerías y para irme a la segura, entre lo que más busqué fue soul de la primera mitad de los setentas. Había mucho que encontrar ahí.
-¿Cómo estuvieron tus caminatas por Brooklyn?
-Yo nunca he sido muy ortodoxo en cuanto a sentirme rapero. Me siento más músico. Sin embargo, el hip hop es un elemento súper fuerte en la música que hago yo. Es una expresión cultural que hoy está muy ramificada. Muy diversificada. Me pareció motivante el ejercicio de volver al origen de todo.
-Como profesor, ¿qué te pareció el episodio de la PSU?
-Tuvo distintas fases mi reflexión. El mismo día pensé: "qué lata todos los cabros que se prepararon y no la pudieron dar". Pero luego, en una segunda tirada más profunda, pensé: "qué penca que los cabros tengan que estar pensando durante tanto tiempo en una prueba estandarizada". Y es que eso permea toda la actividad académica en la educación media, tanto así que los saberes que le apasionen a los estudiantes terminan importando súper poco si les va mal en un ensayo de la PSU. El problema no es tanto el mecanismo o la prueba estandarizada, que sin dudas tiene problemas que se pueden mejorar, sino lo que produce en los establecimientos y los estudiantes que compiten con el parámetro de las pruebas.