En 50% serán rebajados los aranceles que cobran los notarios y conservadores para todos los trámites que realizan al momento de que las personas refinancian sus créditos hipotecarios.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín, dio a conocer el decreto, publicado ayer en el Diario Oficial, que dicta en forma inmediata dicha reducción. "Lo que nosotros estamos haciendo hoy (ayer), es fijar límites a lo que puede cobrar un notario y un conservador al hacer el traspaso de una institución financiera a otra, para facilitarle la vida a cada chileno que tiene una deuda hipotecaria y opta por cambiarse de banco para refinanciar".
Costos operacionales
Según cifras del Gobierno, los diferentes trámites que son necesarios para refinanciar un crédito hipotecario, conocidos como "costos operacionales", presentan en promedio un valor de $660.000, y según datos de la Encuesta Financiera de Hogares del año 2017 y de la Comisión para el Mercado Financiero, más de un millón de hogares mantienen deudas hipotecarias.
"En la práctica, los aranceles que cobran los notarios y conservadores no son fijos por una sola actuación, por lo tanto, hoy se cobra de manera fragmentada, sumando un valor por la firma del notario, otro valor por la copia, otro valor por la certificación, cobrando entonces por distintas etapas. Con esta medida, en cada una de esas etapas, el costo se reduce a la mitad", destacó el secretario de Estado.
Hernán Larraín sostuvo es fundamental que el deudor estudie y esté atento a las tasas del mercado, y así la medida sea efectiva. "Un deudor hipotecario tiene que estudiar realmente si hoy día tiene un crédito hipotecario con una tasa alta y hoy día el mercado tiene una tasa baja y le conviene, por lo tanto, cambiarse", indicó.
ESCRITURAS
El decreto del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, que comenzó a regir ayer, establece que en el caso de las escrituras, así como en todos los otros gravámenes que emiten los notarios por sus gestiones (firmas, fotocopias, etcétera) durante el proceso de refinanciamiento de un crédito hipotecario, podrán valer como máximo el 50% del arancel vigente a la fecha, para cada una de esas actuaciones.
Para el caso de los conservadores de bienes raíces, se estableció que el arancel por la gestión de la cancelación de hipotecas, gravámenes y prohibiciones, así como por las inscripciones que se practiquen en virtud de un refinanciamiento, y cualquier otra actuación complementaria, podrán valer como máximo el 50% del costo vigente a la fecha, para cada uno de estos trámites.
Además, el decreto establece que los notarios y conservadores, cuando realicen el recargo adicional al arancel, conocido como "milaje" (cobro de $1 por cada $1.000 del valor del refinanciamiento), solamente regirá en la medida que el monto del crédito nuevo sea superior al monto del crédito anterior, y siempre sobre la diferencia del valor entre ambos.
Actualmente, este cobro se realiza en todas las operaciones de refinanciamiento por parte de un notario y también del conservador, con un tope de hasta $128 millones, es decir, generando un doble cobro de hasta 128.000 pesos al usuario, el que prácticamente será eliminado a partir de la nueva normativa.
Si los notarios o conservadores no cumplen la nueva normativa, se puede reclamar a la Comisión de Mercado Financiero y a los ministros visitadores de las Cortes de Apelaciones.
Portabilidad financiera
La iniciativa anunciada por el Gobierno se enmarca y se complementa con el proyecto de portabilidad financiera, que se encuentra en trámite legislativo. La iniciativa rebaja los costos y trabas que enfrentan los consumidores a la hora de cambiarse o mover sus productos financieros de una institución a otra. Esto, a nivel de créditos hipotecarios, créditos de consumo y automotrices, tarjetas de crédito o cuentas corrientes.