Es conocida como la "Dama de Hierro" de la farándula y, los años que lleva en el medio, la avalan. Francisca García - Huidobro es una mujer que no tiene pelos en la lengua a la hora de decir lo que piensa, lo cual le ha valido en innumerables ocasiones críticas no sólo del público -confesó incluso amenazas de grupos LGBT-, sino también de sus pares.

La animadora de Canal 13, estuvo durante toda esta semana festivalera en la Ciudad Jardín, lugar desde donde se transmitió en vivo y en directo el programa satélite "Échale la culpa a Viña", y que la tuvo a cargo de la animación junto a Karen Doggenweiler y en el que también compartió set con Raquel Argandoña y el periodista Gino Costa.

Dentro de su apretada agenda, el rostro de la señal de Luksic se dio el tiempo de conversar con este Diario sobre la edición del Festival de Viña que pasó, sus proyectos a futuro, como el rol de jurado que tendrá en el programa "Bailando por un sueño" que se estrenaba anoche, y de su actual estado de salud luego de sufrir, una insuficiencia renal que la tuvo bien complicada.

- No había tenido la oportunidad de trabajar con Karen Doggenweiler, ¿cómo ha sido trabajar junto a ella y con Raquel Argandoña?

- Karen es un encanto. Ha sido un descubrimiento maravilloso. Tiene un sentido del humor muy fresco y lo hemos pasado increíble. Realmente Karen ha sido espectacular. Y con Raquel, todo súper bien, ella es una mujer que vale todo su peso en TV. Es un clásico de estos programas, un personaje indispensable.

- ¿Qué le parece que este año "Échale la culpa a Viña" haya sido el único programa que se realizó desde la Ciudad Jardín?

- Triste. Todos sabemos cómo están las cosas y se entiende que este año haya sido más restringido. Pero ojalá que los próximos años todos los programas puedan hacerse desde acá, porque le dan movimiento a la ciudad y la importancia que merece el Festival.

- ¿Siente que debería haber una reformulación en torno al Festival? Quizás hacer más actividades en Viña, considerando que siempre hay gente que les gusta ir a ver a los rostros de TV...

- Yo creo que no hay que andar tratando de inventar la rueda con todo. El Festival funciona de la misma manera hace 61 años y ha funcionado perfecto, es importante para nuestro país y un evento que la gente disfruta mucho. Tiene que ir adaptándose a los tiempos, sin duda, entender el contexto; pero no hablaría de una refundación.

- En el contexto social que vivimos ¿cree que fue pertinente hacer el Festival?, considerando lo sucedido la primera jornada y la baja asistencia que hubo algunas noches.

- El Festival siempre tiene noches que se venden más que otras. Obviamente la de Ricky Martin o Maroon 5. Lo que pasó la primera noche es lamentable, pero poner la responsabilidad al Festival de Viña sobre un tropel de descerebrados que fueron a quemar un hotel, me parece súper injusto. Sí, había que hacer el Festival. La noche que estuvo más vacía fue la del lunes, cuando estuvo Mon Laferte. Creo que ahí hubo llamados a no ir al Festival; pero la noche de Ana Gabriel y Pimpinela estaba llena. Sí, se ve menos gente, porque la gente está asustada. Siempre se hacen llamados a funa. A nosotros también acá en el Sheraton nos dijeron que tuviéramos cuidado y la verdad es que... Bueno siempre habrá alguien que quiera echar a perder la fiesta. Pero yo siento que los organizadores de la fiesta hemos sido muy obstinados y no hemos permitido que nos echen a perder la fiesta.

Evaluando estrellas

- ¿Qué se viene en lo próximo?

- En lo extremadamente cercano, hoy (ayer) empiezo en "Bailando por un sueño" (Canal 13), donde me toca el rol de jurado. Y eso es por los próximos cuatro meses, de lunes a jueves, en vivo y en directo. Después, ya regreso al "Sigamos de Largo" con Sergio (Lagos) y la Maly (Jorquera).

- ¿Se siente cómoda con ese formato nuevo?

- Siempre implica un desafío, pero ser jurado es algo que he hecho otras veces. Es difícil, porque uno tiene que renovar el repertorio; uno no puede ser el mismo jurado que fue hace diez años en "Fiebre de baile". Pero yo tampoco soy la misma persona que estaba en "Fiebre de baile". Ahora yo tampoco sé qué rol voy a jugar. Está muy establecido que ésta va a ser la mala, el otro el chistoso... Yo, la verdad, que no tengo idea. Voy a ir viendo sobre la marcha qué me producen los participantes, si son un tropel de flojos o nos encontramos básicamente con los reemplazantes de los bailarines del Municipal. Ahí voy a ir viendo, no llevo nada preparado.

-No puedo dejar de preguntar por su salud. ¿Cómo se ha sentido haciendo un programa en vivo todos estos días?

- Estoy mucho mejor, cuidándome. Todavía tengo un par de cosas que quedaron medias pendientes. Me tengo que operar ahora, cuando regrese a Santiago. A mediados de marzo tengo una cirugía al riñón. Pero, estoy haciendo todo lo posible que tengo que hacer para que no me vuelva a pasar nunca más lo que me pasó. Pero estoy muy bien; si no, no estaría acá estaría en Santiago cuidándome para el Bailando por un Sueño.

"Voy a ir viendo sobre la marcha que me producen los participantes, si son un tropel de flojos o nos encontramos básicamente con los reemplazantes de los bailarines del Municipal. Ahí voy a ir viendo".

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