Estados Unidos inicia proceso formal para abandonar la OMS
WASHINGTON. La ONU indicó que está verificando con la entidad "si se cumplen todas las condiciones" para que el anuncio se pueda concretar.
Estados Unidos anunció ayer que inició el proceso para retirarse de la Organización Mundial de la Salud (OMS), un paso que tardará un año en hacerse efectivo y que aún podría interrumpirse si el presidente Donald Trump pierde las elecciones de noviembre o si el Congreso decide intervenir.
En una carta enviada el lunes al secretario general de la ONU, António Guterres, la Casa Blanca cumplió con una amenaza que llevaba haciendo desde abril, cuando Trump acusó por primera vez a la OMS de estar "sesgada" a favor de China y de haber gestionado mal la emergencia sanitaria del coronavirus.
El portavoz del secretario general de las Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, confirmó en un comunicado que recibió la notificación el lunes y que ahora están "en el proceso de verificar con la OMS si se cumplen todas las condiciones para la retirada".
En Estados Unidos, el senador demócrata Bob Menéndez ratificó por Twitter la noticia. "El Congreso ha recibido la notificación de que el Presidente ha retirado formalmente a Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud en medio de una pandemia. Calificar de caótica e incoherente la respuesta de Trump al covid no hace justicia. Esto no protegerá las vidas o intereses estadounidenses, esto deja a los estadounidenses enfermos y a Estados Unidos solo", escribió el político en la red social.
Un alto funcionario de la Casa Blanca que pidió el anonimato, reveló a la agencia Efe que "el aviso de la retirada de Estados Unidos, que se hará efectiva el 6 de julio de 2021, se ha enviado al secretario general de la ONU, que es el depositario de la OMS".
Fondos
Trump llevaba dos meses avisando con la retirada de la organización con sede en Ginebra, a la que congeló temporalmente los fondos en abril, y de la que Estados Unidos forma parte desde su creación en 1948. A fines de mayo, el mandatario anunció su decisión de "romper" definitivamente con la OMS y canalizar los fondos que le aportaba "a otras necesidades urgentes de salud pública a nivel global".
Su notificación de retirada llega en un momento en el que el organismo sigue intentando combatir una pandemia que está lejos de quedar bajo control y que ha afectado a EE.UU. más que a ningún otro país, con al menos 3 millones 87 mil contagiados por el virus y más de 133 mil fallecidos.
La salida de Estados Unidos dejaría a la OMS sin su principal donante, que en los últimos años le ha aportado entre 400 y 500 millones de dólares anuales, aproximadamente el 15% del presupuesto total del organismo. Sin embargo, la respuesta de la ONU al anuncio de Trump dejó claro que todavía no es seguro que llegue a producirse esa ruptura.
Cuando se sumó a la OMS en 1948, Estados Unidos impuso "ciertas condiciones para su posible retirada", que incluyen una notificación previa de un año y "el cumplimiento total con el pago de sus obligaciones financieras", precisó el portavoz del secretario general ONU.
Washington no aclaró si tendría que desembolsar todos los fondos que congeló a la OMS como paso previo a la retirada, pero todo apunta a que es así, según un informe del independiente Servicio de Investigación del Congreso. Cerca de un tercio del aporte de EE.UU. no puede alterarse sin el visto bueno del Congreso, según The Washington Post.