Licitación del Parque Costanera
La obra puertomontina dio un paso sustantivo para su materialización con el inicio del proceso para adjudicar su construcción. La ciudadanía, las autoridades y el sector privado tendrán que reformular la relación que han tenido con el borde costero de la ciudad.
Después de años de espera, el proyecto para que Puerto Montt cuente con una nueva Costanera, acorde al sostenido crecimiento que ha experimentado en los últimos años y a su consolidación como gran polo metropolitano del sur del país, ha dado esta semana un paso sustantivo hacia su concreción, luego que el Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) diera la partida a la anhelada licitación de la obra, que contempla una cuantiosa inversión de $14 mil millones y el inicio de los trabajos a partir del cuarto trimestre de este año. Esta iniciativa ha sido largamente acariciada por los puertomontinos, que ya dieron clara muestra del interés que hay en torno al aspecto del borde costero tras la votación popular que hubo para decidir el futuro de la escultura "Sentados frente al Mar", en la cual participaron 40 mil personas de manera digital y 2 mil a través del voto presencial.
La remodelación vendrá a recuperar un espacio urbano sucesivamente maltratado en los últimos años. Además de la falta de coherencia urbanística que hay en el sector, habrá de advertirse que hace tiempo, transitar por esa zona reviste ciertos grados de inseguridad que han terminado por ahuyentar a la población local y a los turistas.
Se supone que la nueva Costanera lucirá de una forma muy diferente a la actual. Habrá un paseo peatonal moderno, dos áreas deportivas, dos multicanchas, tres áreas de juegos infantiles, un skatepark, un pump truck para bicicletas, cinco plazas y áreas verdes, todo lo cual debería facilitar la recuperación del espacio público por parte de las personas, que deberán ser garantes con su presencia y cuidado del parque que hace tanto tiempo se espera.
En este futuro escenario, todos los actores tendrán que tener una mayor cautela acerca de la relación del borde costero con la ciudad. Las carpas para el comercio ambulante que se instalaron al costado del mall deberían ser parte del pasado en ese momento, y tanto el municipio como el grupo Pasmar tendrán que resolver si es pertinente o no, para los fines urbanísticos, la construcción de la proyectada pasarela en el mall del sector.