24 de junio de 2020: ¡los Selk'nam están vivos! (¿y los chonos?)
HISTORIA. El pasado 24 de junio, en el marco del día de los pueblos originarios, la Cámara de Diputados aprobó por una inmensa mayoría (148 votos a favor y 2 abstenciones) un proyecto de Ley que dio reconocimiento como pueblo vivo a los Selk'nam con lo que ellos pasan a ser nuestra décima cultura originaria.
En la Región de Los Lagos, para el último Censo de 2017, un 28,2% de su población (228.766 personas) se consideró indígena, lo que es sustantivamente alto respecto al promedio del país que arrojó un 12,8%.
Ese porcentaje ha ido creciendo con el retorno a la Democracia en 1990 y con la Ley 19.253 de 1993 que creó la Conadi. Aun así, el relato homogeneizador y centralista ha llevado que aún para el Censo de 2002 solo un 4,58% fue considerado indígena a pesar de que diversos estudios han demostrado que genéticamente cerca de un 50% de nosotros tenemos principalmente ancestros directos indígenas (Berríos, Universidad de Chile, 2016) e incluso Francisco Rothhammer, Premio Nacional de Ciencias Naturales 2016, afirma que el 86% de los chilenos tiene una madre indígena y un padre europeo entre sus antepasados.
En el contexto de la discusión parlamentaria, la presidenta de la Corporacion Selk'nam Chile, Hema'ny Molina Vargas reflexionaba: "Se nos consideró extintos y se fue pasando la voz, sin que nadie se tomara la molestia de hacer una investigación al respecto".
El diputado liberal por la Región de Los Lagos Alejandro Bernales señaló también: "Hoy pedimos perdón. La verdadera riqueza del país radica en nuestra diversidad cultural. La aprobación de este proyecto hace justicia en incorporar al pueblo Selk'nam entre las principales etnias indígenas reconocidas por el Estado. La deuda que tenemos con ellos por el genocidio del que fueron víctimas es impagable. Esta ley es un paso para reconocer sus derechos y avanzar en la reparación histórica del pueblo Selk'nam".
Antropóloga
Tuve el privilegio de conocer a Anne Chapman (1922-2010) en el Teatro del Lago de Frutillar. Ella fue una reconocida antropóloga franco-estadounidense que investigó en Tierra del Fuego durante los años 1960-1970 y la que dio a conocer la cultura Selk'nam a nivel mundial. Anne, con su espíritu humilde y su genuino interés por conocer a los otros, en 1964 aprendió de Lola Kiepja (1880-1966), continuando su trabajo etnográfico con su segunda informante Angela Loij (1900-1974).
En su libro de 1982 "Los selk'nam. La vida de los onas" recoge los trabajos arqueológicos de diferentes autores, lo que complementa con su trabajo de Historia Oral. De acuerdo a ella "hace 50 mil años o más, cazadores-recolectores que provenían de Asia penetraron en América" por el estrecho de Bering, "…hace alrededor de 12 mil años grupos de cazadores ya habitaron el extremo sur de este inmenso continente, no lejos de la costa del Estrecho de Magallanes…"
La evidencia más antigua en Tierra del Fuego fueron descubiertas por Laming- Emperaire con 9.500 años y por parte del arqueólogo chileno Mauricio Massone con 10.400 años.
Por otro lado, de acuerdo a su cosmovisión, "una vez ingresados a esta nueva tierra llamada Karukinká permanecieron por un largo tiempo cazando y luego regresando a sus territorios de origen…sin embargo se produjo un cataclismo con fuertes temblores de tierra, acompañado de espantosos relámpagos, truenos y lluvias torrenciales, fenómeno que duró varios días" (Massone, 1982) lo que coincide con el fin de la última glaciación hace unos 12.000 años por lo que los puentes que unían a Tierra del Fuego desaparecieron creándose el Estrecho de Magallanes.
La cultura selk'nam es extremadamente compleja y rica. Se podría explicar la ceremonia HAIN por la cual los niños se transformaban en hombres pero quizás el mejor ejemplo es su religión la que fue desconocida por mucho tiempo.
Espiritualidad
Martín Gusinde (1886-1969) sacerdote del Verbo Divino pudo dilucidar que el ser supremo era llamado Temáukel "un espíritu puro, sin cuerpo que existía con anterioridad a los hombres.
Él creó el cielo y la tierra, que en su origen conformaban una sola cosa. Kenós, su enviado, tuvo por tarea levantar el cielo a la altura que presenta en la actualidad. Por su intermedia, Temáukel impuso a los hombres las leyes u normas generales que debían regir la vida" (Massone, 1982).
Era tanta la importancia que le daban a su fe que ellos consideraban ilícito e impropio mencionar el nombre del Ser Supremo. Era tan fundamental el relacionarse armoniosamente entre ellos y con su territorio que surgieron los HOHUEN -los primeros seres humanos-, creados por Kenós para ayudar a preservar los mandamientos de Temáukel a través de la introducción de la muerte sobre la tierra "…para evitar que los hombre resucitaran eternamente e hicieran perdurar para siempre los malos recuerdos, las rivalidades y los odios, evitando así que se acumular un conocimiento exagerado de las cosas de este mundo. De tal modo que los Hohuen al morir se transformaron en cerros, estrellas, aves y en diversos elementos físicos" (Massone, 1982).
Cuando nació Lola Kiepja por 1880, comenzó la colonización europea sistemática en Tierra del Fuego (Karukinká), para ese tiempo, se calcula que habían unos 4.000 selk'nam y para cuando ella falleció casi no quedaban personas que se identificaran con esa comunidad por la presión del Estado chileno y argentino que tiene dividido Tierra del Fuego en dos partes casi iguales.
Sin embargo, el tratamiento hacia los indígenas y la historia regional ha sido muy distinta ya que gracias al sistema Federal de gobierno trasandino, los Selk'nam han sido reconocidos como tales desde 1995, incluso se les ha reconocido el derecho a sus tierras en las cercanías de Tolhuin por parte de la 'Comunidad Rafaela Ishton' y se eligió a Ermelinda Amalia Gudiño como su primera diputada en 2008.
Hasta el mes pasado, los pueblos indígenas que el Estado había reconocido como existentes eran 9: mapuches, aimara, diaguita, atacameño, quechua, rapanui, kolla, kawésqar y yagán.
En 2006 se reconoció la existencia actual de los diaguitas, actualmente se está discutiendo la de los changos en el norte. Hoy las 1.444 personas que se sintieron identificadas como Selk'nam en el último censo de 2017, la 'Comunidad Covadonga Ona' representada legalmente por la Corporación Selk'nam Chile y los profesionales de la Universidad Católica Silva Henríquez que fueron claves para el éxito, han logrado oficialmente un reconocimiento de una cultura de más de 9.000 años que tenemos que aprender a valorar y divulgar especialmente a través de la educación.
Chonos
Queda pendiente preguntarnos por qué no se puede seguir este ejemplo con los pueblos chonos de nuestro territorio que también se consideraban erróneamente 'extinguidos' y que, como parte de los pueblos de la Patagonia siguen vivos en sus descendientes y, sobre todo, en las extraordinarias habilidades marítimas de los chilotes.
La diversidad de culturas y nuestra integración con la naturaleza es la base de la riqueza de la Humanidad.
50.000 años atrás habrían llegado a América cazadores-recolectores desde Asia por el Estrecho de Bering.
50% de los chilenos tenemos antepasados indígenas. En el último Censo (2017), el 28,2% de la población de la región se consideró indígena.