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la estación la paloma, ubicada en la parte alta de puerto montt, fue inaugurada a fines de 2005 por el entonces presidente ricardo lagos. así luce en la actualidad.
Errázuriz se compromete con el retorno del tren, pero advierte que para que ello suceda necesita también del compromiso y apoyo del alcalde Paredes. Y si bien la intención del ejecutivo es tratar de llegar a Puerto Varas en un inicio, no todos están de acuerdo con esta idea.
Tal es el caso del alcalde de Puerto Varas, Ramón Bahamonde, quien argumenta que un servicio de este tipo "cortaría Puerto Varas". El jefe comunal, eso sí, ve mucho más factible y útil que se pueda concretar un tren que una Puerto Montt con Alerce, debido a la necesidad de una mejor conexión que requiere la ciudad satélite.
Sin embargo, a diferencia de lo que plantea Errázuriz y de la propuesta de Paredes, Orlando Aravena cree que lo más conveniente es que en una primera instancia el tren pudiese unir Puerto Montt con Chillán. "En redes sociales son miles los que están pidiendo tren desde Puerto Montt hacia el norte. Incluso hasta La Serena, debido a que no podemos dejar de disponer de un servicio tan esencial e importante para la comunidad y económicamente viable. Para qué dejarlo. Así como lo retiraron, colóquenlo, si dineros hay. Nadie puede decir que Chile no tiene recursos", lanza.
Aravena valora que Pedro Pablo Errázuriz, quien sostuvo una reunión durante esta semana con el alcalde Paredes, "esté entusiasmado con el proyecto". Destaca que "a Errázuriz le gusta ferrocarriles y tengo mucha confianza de que, en sus planes trienales, pueda incluir a Puerto Montt".
Y es que para el dirigente, si esto llegase a ocurrir, "sería una bendición para este país porque el tren es un aliciente, una ayuda y una forma para salir del subdesarrollo, justamente para subirnos al tren del desarrollo".
Para el presidente del Centro para el Progreso, el proyecto tiene que ser interesante y económicamente viable, aunque precisa que al igual que en otras partes del mundo, el tren puede ser subdsidiado. "Pensamos que debe ser, por lo menos, Puerto Montt-Osorno, porque hay mucha gente que trabaja en Puerto Montt, pero vive en Osorno. Sería un gran movimiento social, económico y turístico", expresa.
En efecto, el turismo es una de las áreas que se podría ver beneficiada con el retorno del tren. Así lo plantea Richard Paredes, quien es director de la carrera de Turismo del Instituto Profesional Santo Tomás de Puerto Montt.
El docente coloca el acento en la necesidad que existe de poder potenciar la ruta que une Puerto Montt con Osorno, y el tren le daría una respuesta satisfactoria a este requerimiento turístico.
Por lo demás, "los atractivos naturales ya están. Gracias a Dios tenemos un país bastante rico en esta materia, por lo que hay que ir generando actividades que cautiven a la gente", remarca Paredes.
Además, recuerda que hace un tiempo se hizo hincapié en que el tren podría volver a través de la actividad turística para después transformarse en un medio de transporte, como suele conocerse.
De ahí que esté convencido de que la "punta de lanza" para que se retome la actividad ferroviaria en la zona es el turismo. "Hay que pensar que hace unos años (2005), cuando se intentó volver como transporte de personas, fracasó rotundamente. Y por eso hoy día se tiene que buscar el reinicio o reactivación de la actividad a través del turismo", sugiere.
Herida
En efecto, el fallido retorno en 2005 es una herida que aún no cierra en Puerto Montt. Y así lo reconoce el presidente del Centro para el Progreso, Orlando Aravena.
A juicio del dirigente, el ex Presidente Ricardo Lagos, quien llegó hasta la estación de La Paloma para la reinauguración de este servicio una semana antes de las elecciones presidenciales en las que se impuso Michelle Bachelet, tiene "una deuda con el sur de Chile. No la ha querido aceptar, pero es así. Pero es también una deuda que tiene el país, porque no es posible que trajeran el tren, con una inauguración fabulosa, en el barrio alto de la ciudad...y no funcionara".
Por eso, ahora su llamado es al alcalde, a la Cámara de Comercio y a las organizaciones sociales, para que lideren esta cruzada. "El Gobierno se tiene que preocupar más de las regiones", manifiesta.
Punto importante el que aborda Aravena, ya que una de las críticas que más se han escuchado durante este tiempo es, precisamente, el impacto del centralismo en el desarrollo de este proyecto.
Así lo describe Jorge Weil, economista, académico de la Universidad de Los Lagos y de reconocida labor por la descentralización del país.
En su análisis, Weil describe que hace 15 años, cuando "llegaban en un convoy ferroviario las autoridades nacionales reactivando este tipo de transporte, se abrieron grandes expectativas para la región. El retorno de la red ferroviaria de carga y pasajeros llevaba aparejado la revalorización de los territorios que darían un fuerte impulso al desarrollo regional, con un eje estructurante de comunicaciones. Sin embargo, no hubo continuidad en los gobiernos posteriores y a ello se agregaron las equivocadas compras de locomotoras de segunda mano y de corto andar".
Además, expone que "en un país geográficamente tan extenso, la carencia de un eje de comunicaciones ferroviario estructurante continúa siendo una limitante estratégica del
el 6 de diciembre de 2005 fue un día histórico. Ese día volvió el tren.