Tras someterse a una serie de exámenes, finalmente pudo regresar a su casa de Calbuco, bajo un tratamiento que debe cumplir en forma estricta.

No obstante, su recuperación no fue completa, porque quedó con secuelas. "Un 20 por ciento de mi pulmón izquierdo está quedando como una pasita. No me molesta para respirar, pero a veces me cansa. También tengo daño en las cuerdas vocales. Cuando hablo mucho o grito, empiezan a inflamarse. Pero eso no es nada, a todo lo que tuve que pasar".

En cuanto a la pérdida del olfato y gusto, afirmó que ambos están de vuelta. "Costó mucho, pero hace como un mes que lo conseguí".

Respecto al estado de salud de su hijo, expuso que "creó todas las defensas. Le hicieron 4 PCR y todos salieron negativos. El pediatra del hospital me dijo que la única respuesta a eso, es que su organismo creó todas las defensas. Ahora no es contagiante, ni puede ser contagiado".

Sobre su estadía en la residencia sanitaria, donde "estuve un mes luchando por mi vida", dijo que fue ahí donde "me salvaron, porque si me hubiese devuelto al hospital, hubiese sido una más...".

Al recapitular esos días de incertidumbre, en los que se enfrentó en forma periódica a la sensación de que serían sus últimos momentos, "lo único que puedo decir es que la gente se cuide. ¿Qué tiene que pasar para que lo hagan?".

Pero también apunta al papel del Estado. "Las personas deben seguir trabajando, pero si están en cuarentena, no pueden salir. Ahí el gobierno debe meterse la mano en el bolsillo y entregar al menos 500 mil pesos mensuales para sobrevivir, hasta que pase esto".

El doctor Ignacio Auguin es el encargado de residencias sanitarias en Puerto Montt, las únicas también disponibles para la Provincia de Llanquihue.

Sobre la permanencia y recuperación de la comerciante calbucana, el médico aseguró que se trata de un caso emblemático. "Su vida cambió gracias a la residencia sanitaria. La señora Alicia llegó dada de alta desde el Hospital de Puerto Montt, pero no estaba bien. Estaba generando una neumonía como el covid. Desde que la comenzamos a tratar, era una paciente que iba camino a descompensarse, a regresar al Hospital".

Auguin comentó que el covid-19 es una enfermedad que en algunas personas se comporta como un resfrío común, por lo que en esos casos los enfermos no evidencian síntomas complejos. Pero, en otros, "se presenta como una neumonía agresiva".

Recordó que la paciente estaba desorientada respecto a su estado de salud, por lo que se le expuso su situación y el tratamiento que debía seguir para superar su condición.

"La señora Alicia estuvo harto tiempo con nosotros, más que una cuarentena normal (14 días), alrededor de tres semanas. Y salió francamente recuperada", destacó.

Al parecer del médico, "es muy posible que su pronóstico habría sido diferente y más crónico, si las residencias sanitaria no hubiesen existido".

Admitió que el acompañamiento de su hijo de 9 años y, posteriormente, de su marido, contribuyó en materia de soporte moral. "Entendemos que la salud no es sólo un bienestar físico, también es un bienestar emocional, familiar. Hemos intentado hacer eso, acercar las residencias a las personas que, al ser un instrumento de salud pública, no tiene ningún costo. Ni siquiera se le pregunta a las personas por su previsión. Este es el mejor lugar para cumplir un confinamiento efectivo", subrayó.

Así como ese caso, agregó, hay otros de pacientes "que estaban en franco empeoramiento, pero que no estaban con criterio de hospitalización. Pero hay muchas personas que están en esta especie de limbo, que no tienen esos criterios, pero que su salud está comprometida".

Atención 24/7

De esta manera, en las residencias se ofrece una alternativa para esos pacientes que requieren de cuidados de atención médica y de enfermería, las 24 horas del día.

"Dicho de otra forma, estamos funcionando como hospitales de baja complejidad. Contamos con herramientas clínicas, farmacológicas y de derivación a los principales centros asistenciales de la ciudad, lo que faculta a una persona a cumplir su cuarentena de manera íntegra, mucho más tranquila que si estuviera en su domicilio". Para ello, también cuentan con personal capacitado (120 en total), como técnicos de enfermería, enfermeras, nutricionistas y médicos, que hacen turnos para estar disponibles durante todo el día. "Si hay un lugar donde una persona no se va a contagiar, es en una residencia sanitaria, porque aquí están todas las medidas para que eso no ocurra. No ha habido contacto cruzado y ninguna persona se ha enfermado aquí".

Otro indicador que destacó Auguin es que no han lamentado fallecidos. "En todo este tiempo, hemos tenido que derivar a 4 pacientes más graves al Hospital, quienes se han recuperado. Aunque hemos derivado a otros pacientes, no tan graves, que se terminan complejizando y agravando en el Hospital y algunos terminaron falleciendo", admitió el profesional.

Sistema

Las residencias sanitarias son dispositivos médicos que reciben a personas que -por distintas razones- no pueden cumplir en sus domicilios con este aislamiento preventivo.

Ofrecen sin costo para el usuario tanto alojamiento, alimentación y tratamientos médicos. "Las personas se alojan en habitaciones privadas, con baño individual; reciben 4 comidas al día y con distintos tipos de regímenes (hipertensos, diabéticos, vegetarianos, etc.). Cada dos días hay cambio de ropa de cama, tienen acceso a televisión con cable y Wifi, así como calefacción central".

En la actualidad operan a un 88% de su capacidad (30 cupos disponibles), lo que está por sobre el 70% promedio nacional de ocupación. Tal situación fue atribuida por Auguin al contexto local de cuarentena y a que "últimamente ha habido una serie de brotes que repercuten en la disponibilidad que tenemos".

El encargado de residencias sanitarias en Puerto Montt remarcó también su característica inclusiva y universal.

"Todas las personas tienen el mismo derecho a utilizar la residencia sanitaria, vengan de donde vengan. Contamos también con residencias especiales para gente que tiene adicciones (alcohol o tabaco) o que tengan discapacidad de cualquier tipo y las que no son autovalentes, les ofrecemos la posibilidad que venga alguien a acompañarlos", resumió.

De hecho, recordó que han recibido a deportistas, empresarios y políticos, como concejales, alcaldes, consejeros regionales, un seremi y funcionarios del Gobierno Regional. "Todos ellos se sentían mucho más seguros en una residencia sanitaria que en sus propias casas", enfatizó.

4 residencias sanitarias existen en Puerto Montt, que están operando con un 88% de su capacidad (247 cupos) ocupada.

269 ingresos ha reportado la residencia del Hotel Antupirén; 234 personas ha recibido el Antupirén, 101 el Castellano y 9 el Ibis, que partió esta semana.

1.058 altas totaliza el sistema de residencias sanitarias en Puerto Montt, El primer ingreso fue el 7 de abril, en el Hotel Don Vicente, hoy sin actividad.