"El delegado es una intromisión al proceso de descentralización"
El ex intendente y ex diputado aborda los desafíos que tendrá la primera generación de autoridades regionales electas por la ciudadanía, luego que fuera confirmado como candidato al nuevo puesto por la Democracia Cristiana.
Patricio Vallespín tiene claro que la primera generación de gobernadores regionales elegidos por la ciudadanía no contará con muchas atribuciones, por lo que tendrán una labor más bien "fundacional" y que deberán luchar bastante con el nivel central para contar con más herramientas que les permitan desarrollar de mejor forma su trabajo y así dar respuesta a las demandas de sus electores.
De ello está claro el ex intendente de Los Lagos y ex diputado, quien hace unos días fue confirmado como candidato a gobernador regional por su partido, la Democracia Cristiana, en los comicios que tendrán lugar el próximo año.
Vallespín asume el desafío. Dice estar motivado con la designación y asegura que una de las luchas que se tienen que dar desde regiones es la de terminar con la figura del delegado presidencial.
-¿Cómo califica este primer período de gobernadores regionales?
-Será el punto de partida de un momento histórico, de avanzar hacia la descentralización. Tengo mucha convicción de que hay una tarea por realizar y que hay algo importante que se puede construir desde las regiones, para efectivamente avanzar hacia la descentralización, toda vez que la gobernanza regional, que está establecida por ley, constituye sólo un punto de partida y no de llegada, por lo que hay que construir una agenda descentralizadora y así lo dije, en su oportunidad, en la Cámara de Diputados.
-¿El nivel central seguirá con más atribuciones en regiones que la autoridad electa?
-Esto, claramente, es una descentralización tutelada, con mucha injerencia del nivel nacional, lo que es algo que se tendrá que ir modificando. Por eso es que serán tan importantes estos primeros gobernadores regionales, ya que tendrán por labor construir las bases de la descentralización real de Chile, que obviamente ahora es insuficiente.
-Todavía faltan leyes para que desarrollen mejor su labor...
-Es un retraso inaceptable del Gobierno al no existir un compromiso real con el proceso de descentralización. Ahora, yo espero que no prosperen algunas cosas que uno ha escuchado respecto de postergar la elección (de gobernadores regionales) porque en el mundo, donde la descentralización es seria, los gobiernos territoriales (municipios y gobiernos regionales) se eligen al mismo tiempo, que es lo que está pensado para Chile; por lo que si eso cambia variará por completo la mirada desde los territorios como opción de desarrollo y, por lo tanto, espero que ello no prospere. Ahora, son pocos los países en los que se partió con un sistema armado, ya que la descentralización se construye de manera paulatina, pero con mucha claridad respecto de los hitos y hacia dónde se tiene que llegar. Por eso creo que habrá que instalar la agenda descentralizadora desde los gobiernos regionales.
-¿Cómo se puede abordar un cargo que carece de muchas atribuciones y recursos?
-Este es el desafío que se tiene que tomar con mucha responsabilidad y creatividad; pero al mismo tiempo, colocando los temas sobre la mesa para poder construir una verdadera descentralización. Si hay un sistema en el cual los ciudadanos eligen a su autoridad regional, ésta debe ser investida de nuevas atribuciones y la ley permite que se puedan ir solicitando nuevas competencias y nuevos recursos. Sin embargo, hay cosas que tendrán que terminar, como el delegado presidencial, que es, además, quien designará a los seremis junto al Presidente y que realizará las labores respectivas en el tema de orden público y de manejo de emergencias y catástrofes.
-¿Será entonces un obstáculo para una autoridad elegida por la ciudadanía?
-Esta institución debe acabarse porque constituye una intromisión al proceso de descentralización. Por eso hay que construir los cambios legales y de procedimientos que se requieran en la agenda de descentralización. Esto (elección) es un punto de partida y no de llegada y se tienen que realizar modificaciones. Y por eso quien ocupe este cargo deberá tener y construir una mirada de futuro y concordar posiciones; pero también golpear la mesa respecto de cuáles son los desafíos y a cómo se tiene que avanzar, de manera de elaborar una postura común de los gobiernos regionales para profundizar en la descentralización que Chile necesita y para que tenga sentido la soberanía ejercida por los ciudadanos de elegir a su autoridad.
-¿Un escenario complejo será que el gobernador regional no pueda disponer de su gabinete?
-Esas son las cosas que habrá que resolver porque el sistema actual está construido de una manera que dependerá mucho de quién sea el delegado presidencial y de quién sea el gobernador, ya que pudiera existir o sólo conflicto o colaboración. Si bien mi apuesta es por la colaboración, lo ideal es que no exista el delegado presidencial.
-¿Una de las primeras tareas será, por lo tanto, terminar con los delegados presidenciales?
-Las descentralizaciones verdaderas son con la autoridad elegida en el territorio y con funciones que hoy no tiene, como la coordinación de las instituciones públicas de la región, ya que la tendrá el delegado presidencial, lo que es absurdo y tendrá que modificarse, porque si usted eligió a una autoridad empoderada por los ciudadanos, lo lógico es que sea quien cumpla esta tarea, así como sea quien nomine a las autoridades de todas las carteras de la región, para que de verdad sea un gobierno regional.
Fundacional
-¿Qué labor deberán cumplir estas autoridades?
-Yo creo que esta primera generación de gobernadores será fundacional, desde el punto de vista de las nuevas bases del sistema. Pero ojo, tiene que hacer las dos cosas: profundizar la descentralización con una agenda