Estudio hace hincapié en las desigualdades en la movilidad entre comunas y Puerto Montt
INVESTIGACIÓN. Ciudades más pequeñas, como Puerto Varas, tienden a depender de las de mayor rango como Puerto Montt para su desarrollo social y económico.
¿Cómo es la movilidad de quienes trabajan en Puerto Montt, pero no viven ahí? El transporte por razones laborales -a quienes se les denomina conmutantes- impacta profundamente la vida cotidiana de las personas. El hecho de viajar en auto particular, bus o bicicleta genera diferentes efectos en los habitantes. Esto ocurre en sociedades globales, donde es cada vez más usual que el lugar de trabajo y la residencia estén separados por grandes distancias.
Alejandra Lazo, antropóloga del Núcleo Movilidades y Territorios (Movyt) y académica del Departamento de Arquitectura de la Universidad de Los Lagos, investiga desde 2018 este tipo de experiencias en algunas ciudades de la región. El estudio llamado "La movilidad en su ambiente: Etnografía de la experiencia de los conmutantes de las ciudades de Osorno y Puerto Montt en la Región de Los Lagos" aborda el fenómeno de la conmutación interregional en el sur de Chile.
"Son escasos los trabajos que se han realizado sobre estas movilidades en las ciudades intermedias, medias y pequeñas de nuestro país. En este contexto, es clave entender que las dinámicas de la conmutación están relacionadas con el tamaño de las ciudades, ya que las más pequeñas tienden a depender de las de mayor rango para su desarrollo social y económico. Así, emergen en estos territorios dispositivos de transporte como bicicletas, lanchas, buses interurbanos y ferrocarriles que generan conectividad con los lugares de trabajo", explica Lazo.
En esta movilidad intrarregional la experiencia de los habitantes o conmutantes se propaga a partir de complejas redes de accesibilidad, lo que muchas veces implica pesados y dificultosos desplazamientos. La antropóloga ha explorado, hasta la fecha, dos comunas de la provincia de Llanquihue -Puerto Varas y Llanquihue-, que aparecen como dependientes de la ciudad de Puerto Montt, según datos de los censos 2002 y 2012. Los y las participantes se definieron como personas que viajan a trabajar a una comuna distinta de la que residen, utilizando transporte público o privado durante más de un año.
Alejandra Lazo dice que "como método de investigación se utiliza el acompañamiento o 'sombreo' en tiempo real y durante los trayectos, lo que ha permitido descubrir cómo se construye el viaje, posibilitando la intromisión del investigador en espacios íntimos, como la casa o el lugar de trabajo, y en sitios de acceso público como calles, microbuses, terminales, plazas o paraderos".
El estudio devela que las experiencias de viaje se relacionan estrechamente con las formas de vida de cada lugar, lo que revitaliza aspectos culturales en el desarrollo afectivo de la movilidad. Puerto Varas, por ejemplo, presenta características de ciudades medianas en expansión, con fuertes componentes de comodidad, amenidad y turismo, asociados a un tipo particular de habitantes.
Ejemplos
Factores como los medios de transporte utilizados, lugares de residencia, y las experiencias y objetos de viaje influyen en las rutinas de las personas estudiadas y, además, reproducen desigualdades sociales entre los conmutantes. En este sentido, la investigadora presenta tres ejemplos.
Por una parte, el caso de Francisco, quien posee un automóvil particular y se desplaza de manera autónoma y cómoda, organizando y controlando los tiempos y movimientos que realiza en las rutas disponibles. Él representa la noción de fluidez en el viaje, reproduciendo lógicas de instantaneidad en sus prácticas de movilidad. Su independencia económica lo posiciona como una persona que puede elegir dónde, cuándo y cómo moverse entre las distintas ciudades de su región.