Hora de toque de queda: duro golpe a repartidores
TODOS PIERDEN. Para gastronómicos y trabajadores que hacen delivery es una estocada mortal para las mermadas ventas.
Como un nuevo golpe a las disminuidas ventas y bajos ingresos calificaron los trabajadores del sector gastronómico la aplicación de una nueva hora para el toque de queda, el cual regirá a partir de mañana para restringir la movilidad de la ciudadanía y evitar la propagación de covid-19. En Puerto Montt, este nuevo horario será desde las 20 horas hasta las 5 horas.
Para los dueños de negocios que trabajan en modo delivery y para las personas que se desempeñan de manera independiente en el servicio de reparto a domicilio, el recorte del horario de desplazamiento representa nuevas pérdidas económicas.
El presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de la ciudad, Eduardo Salazar, pidió una mayor fiscalización para salir pronto del confinamiento y no seguir afectando a la economía local con medidas que, a su juicio, no han funcionado para evitar contagios de covid-19 y solo han causado estragos en los ingresos de muchas familias.
"La nueva medida anunciada funcionará cuando exista control. Llevamos tres meses con cuarentena y no ha tenido efecto porque no ha existido control dentro de la ciudad ni en los accesos a la misma ni en los que salen a otras comunas. Es urgente que se administren los controles y se tomen las medidas. No podemos seguir cerrados", expresó.
Por su parte, el presidente del gremio de los gastronómicos de la Región Los Lagos, Julio Jenkins, manifestó que además de acortar el horario de los negocios que funcionan en modo delivery; los empleados o trabajadores que se dedican a esto sin tener contratos dejarán de percibir ingresos y, por otro lado, los locales deberán utilizar solo repartidores suscritos a las aplicaciones que quitan elevados porcentajes de las ventas.
"Ya no podrá haber retiro en locales y las compañías que hacen delivery son caras, las aplicaciones obligan a pagar casi el 30% de las ventas y eso es muy alto en estos tiempos, pero son los únicos que podrán repartir en la noche por el tema de contrato", aseveró.
Jenkins dijo que si la situación para muchos ha estado complicada, ahora solo se pondrá peor.
"Nos tienen muy complicados. Lo único que queremos es poder partir nuevamente con nuestros negocios y trabajar. Levanten la cuarentena, permitan producir. El ministro (de Economía) dice que la gente no se enferma en los trabajos, entonces que nos dejen abrir, que por lo menos pasemos a Fase 2. Cómo es posible que a menos de 17 kilómetros esté Puerto Varas con sus locales abiertos con medidas y nosotros confinados y con más casos", dijo.
El jefe de adquisiciones de Café Central Sherlock, Raúl Soza calificó como "desastre" la disposición sanitaria que, según su criterio solo significará menos ingresos y por lo tanto más crisis económica para los comerciantes.
"Con suerte estamos vendiendo algo, con este adelanto de ahora estaremos peor. Trabajamos con un servicio a domicilio que es costoso y nos quedaremos sin la opción de que el cliente pueda venir a buscar su pedido, puras pérdidas. La cuarentena no sirvió. Aquí en el centro se ve la misma gente que cuando estábamos sin cuarentena porque no hay controles ni fiscalizaciones. Mucha gente ha cerrado sus negocio, cientos de familias sufriendo, esto no da para más", recalcó.
80% es el número en pérdidas que ha tenido el rubro gastronómico, los cuales están cerrados desde que inició la pandemia, en marzo.
35% son los restaurantes que, aproximadamente, funcionan con servicio de reparto a domicilio o retiro en local.