se requieran.

Acerca de la posibilidad de volver a las reuniones litúrgicas, el padre Hernández afirmó que fijarán una reunión con la comunidad, en este caso, a través del Consejo Pastoral Parroquial, para disponer el lugar de culto que cumpla con las características establecidas y eso tardará un tiempo.

En tanto que Marco Ruiz, coordinador de la Agrupación de Laicos del territorio, tiene otra visión que apunta al verdadero trabajo que deben desarrollar los religiosos. "Me llama la atención hoy lo que la Iglesia está viviendo desde hace varias décadas. Veo que los obispos se encuentran más preocupados de los ritos que de las mismas personas, como tampoco he visto que la Conferencia Episcopal se refiera del factor humano que ha producido la pandemia", denunció Ruiz.

Detalló el representante del mundo laico que se añora que la Iglesia esté acompañando a las personas en estos momentos críticos.

Agregó que ellos han estado alejados de los temas que son profundos y que afectan al pueblo de Dios. "No existen protocolos de acompañamiento en los hospitales, como si sucede en otras diócesis de otras partes del mundo, donde exhiben sus preocupaciones en terreno y en la que el propio Papa Francisco ha hecho llamados, con los resguardos correspondientes, para cumplir esta misión que les ha sido encomendada. A nivel nacional, no han escuchado estas palabras, lo que es para mí es motivo de profunda decepción", comentó Ruiz. Manifestó que "Jesucristo, cuando vivió en la tierra, dejó claro que lo primordial son las personas y Dios, pero pareciera que aquello no se respeta en la actualidad".

Por su parte, el pastor de la Iglesia Bautista de Puerto Varas, Boris Rodríguez, afirmó que tal como ocurre con otras congregaciones, se utilizan las plataformas digitales vía redes sociales para efectuar sus servicios, así como trabajando fuertemente la actividad social, pensando en el sufrimiento que vive la gente por la pandemia y otros aspectos negativos como la cesantía.

Afirmó el pastor Rodríguez que en base a este anuncio de realizar cultos en Fase 2, no han "tomado una decisión al respecto" dentro de la organización a nivel nacional. "Se nos llama a recomendar el uso de reuniones virtuales, pensando en que ha habido un aumento en el número de contagios en estas últimas semanas", agregó.

En ese sentido, el pastor puertovarino precisó que están llamando a la prudencia, para que no ocurra ningún tipo de urgencia sanitaria que lamentar, agregando que han sido disciplinados, aguardando la fase 3 para reabrir la iglesia.

"Sabemos que hay otras organizaciones religiosas que tienen la libertad para usar esta modalidad, pero cada congregación debe determinarlo conforme a la ley, con prudencia y responsabilidad", aseguró Rodríguez.

Lejos de la Iglesia

Una visión más crítica sobre estos cambios en las decisiones que emanan del Poder Ejecutivo, expresó el presidente del Consejo de Pastores de Puerto Montt, Patricio Montes.

El máximo representante de la Asamblea de Dios Misión Brasileña, del sector Lagunitas, argumentó que en general que el mundo evangélico nacional se encuentra muy lejos de las definiciones que toma el Gobierno. "Nos sentimos incómodos, ni siquiera estamos en la mesa regional y por esta razón, no nos sentimos representados como credo religioso, siendo que además somos ciudadanos y en ningún momento, se menciona a esta iglesia como un referente en la sociedad", dijo.

Aseguró además "que en el tema de las fases nos tratan más como una mercadería que personas, ya que la iglesia no es una empresa que trabaja con productos".

Puntualizó que las autoridades desconocen la realidad que vive el mundo evangélico y su misión que ha sido preocuparse de la familia y de los niños, con un trabajo muy cercano con lo social y en estos meses ha debido reinventarse para subsistir".

Lo otro que plantea el representante evangélico es que a la autoridad sanitaria tampoco conoce los templos ni las dimensiones que tienen éstos. "Se habla de 10 personas, pero para cumplir nuestra misión tenemos un coro, por ejemplo. Es irrisorio que en un lugar de 10x5 metros, sólo pueda haber una aforo tan pequeño, en comparación con otros recintos como un mall, entonces no se entiende por qué se nos restringe tanto", declaró.

El pastor afirmó que hoy lo que más necesita la gente es una palabra de consuelo y necesitan del afecto de los demás.

Refiriéndose a la posibilidad de este retorno, el pastor Jairo Quinteros, de la Iglesia La Viña del sector La Vara, comentó que los pastores Puerto Montt que integran la Mesa de Unidad Cristiana, resolvieron respetar al cien por ciento las medidas sanitarias formuladas por el Gobierno. "Esto lo hemos hecho pensando que los puertomontinos no se ponen de acuerdo para sacar adelante al país, qué esperanza tendremos y por ello, es que si consideramos no hacer reuniones, es la única manera para poder salir pronto de este gran problema que vive el país". Indicó que a través de la plataforma virtual, como iglesia se ha logrado sacar adelante la misión pastoral, con buenos resultados de audiencia, incluso mejor si se llevara adelante a través de la modalidad presencial.

"Si consideramos no hacer reuniones, creo que es la única forma de salir pronto de este problema país" Pastor Jairo Quinteros

10 personas es el aforo máximo permitido de personas que pueden asistir a una iglesia o templo, de acuerdo a la normativa que existe para la fase 2.

30 representantes evangélicos integran el Consejo de Pastores de Pastores de Puerto Montt. que fue creado a principios de los años 80.

14 de marzo fue la fecha en que el Ejecutivo determinó hacer cambios para que los cultos religiosos se puedan desarrollar en etapa de transición.