"Nunca he actuado ni actué de manera ilícita o de mala fe"
DENUNCIA. A raíz de un informe realizado por la Contraloría, el ex administrador municipal renunció a su cargo. La investigación se hizo con información de los portales de transparencia que están a disposición de la ciudadanía para realizar indagaciones sobre cobro excesivo de horas extras en el municipio.
Contraloría confirmó anomalías y cuestionamientos de cobros excesivos del administrador Carlos Soto y otros funcionarios municipales, lo que desencadenó su renuncia cuando se desempeñaba como alcalde subrogante de Puerto Montt, ante el comienzo de la campaña electoral del titular, Gervoy Paredes.
Ese informe objetó pagos de horas extra por 17 millones de pesos y la realización de una cena, cuyo costo fue 4 millones de pesos aproximados.
El diputado Fidel Espinoza (PS) declaró que el ex administrador quebró las confianzas del alcalde Gervoy Paredes y del Partido Socialista.
El informe detalló que desde junio de 2018 hasta diciembre de 2019, Soto justificó directamente su jornada laboral, además de autorizar él mismo sus horas extra, las que de acuerdo a lo indicado en la investigación ascienden a 13 millones 136 mil 731 pesos, por horas diurnas; y, 4 millones 444 mil 170 pesos, por horas nocturnas, lo que suma 17 millones 580 mil 901 pesos.
Carlos Soto habría cobrado en septiembre por horas extraordinarias la suma de 750 mil pesos; en octubre, 860 mil, en pleno estallido social; y, en noviembre, superó el medio millón de pesos, aún cuando la Municipalidad estuvo en paro.
También se cuestiona el gasto realizado por la Alcaldía en una cena que se realizó el 23 de diciembre de 2019 en el Club de Yates de Puerto Montt, actividad que fue presentada como "jornada-taller", en la que se pretendía entregar y analizar los resultados de una encuesta ciudadana. La actividad costó unos 4 millones de pesos y fue realizada en medio de la crisis social desatada el 18 de octubre del mismo año.
En esta entrevista, Soto respondió por escrito un set de preguntas, con lo que da a conocer su versión de los hechos.
- ¿Va a seguir trabajando en la Municipalidad?
- No, yo ya hice efectiva mi renuncia.
- ¿Cual fue el principal motivo de su renuncia?
- Frente a la construcción imprudente de una mentira acerca de mi persona, haciendo uso malicioso y sesgado de información originada en una fiscalización realizada por Contraloría, voy a llevar adelante las acciones de defensa y reparación de mi nombre y honorabilidad, cuestión que ética y moralmente no me permitiría bajo ningún motivo realizarlas desempeñando el cargo de administrador municipal, ni menos como alcalde subrogante. Tengo un profundo respeto y afecto por la institucionalidad municipal, por lo tanto mi defensa ante estos hechos que pretenden cuestionar públicamente mi probidad y desempeño en el cargo, lo que he hecho es renunciar. El mundo público y privado me conoce, sabe de mi actuar y desempeño, podré haber cometido errores como cualquier ser humano, pero instalar una mentira destinada a hacerme aparecer como un actor que falta a la probidad, no me parece. Hay un acto de ociosidad parlamentaria increíble.
- ¿Qué le parecen los dichos de Fidel Espinoza?
- No me sorprenden. La periferia intelectual, la conceptualización belicosa y obsesiva con la que muchas veces se ha referido a mi, son parte del paisaje. Lamento, desde el punto de vista político el momento que escogió para esta nueva puesta en escena de su manido estilo de ejercer lo que él interpreta como fiscalización, en el que siempre termina siendo juez
"Podré haber cometido errores (...), pero instalar una mentira destinada a hacerme aparecer como un actor que falta a la probidad, no me parece. Hay un acto de ociosidad parlamentaria increíble".
Carlos Soto,
ex administrador municipal.