Ataques informáticos
El mayor uso de internet por la pandemia ha puesto en evidencia el peligro de los ciberdelitos. Tristemente, Chile ocupa lugares de vanguardia en Latinoamérica en cuanto a la incidencia de los delitos informáticos.
Chile tiene una de las tasas de penetración de internet más altas de Latinoamérica, con un 80% de la población conectada y que ha sido una gran ventaja durante esta pandemia, sobre todo para el teletrabajo y el teleestudio. Pero a la vez representa un desafío frente a los ataques informáticos.
Un informe de la empresa de seguridad Symantec ubicó a Chile en el quinto lugar de los países latinoamericanos más propensos a los ciberdelitos. El estudio dice que Brasil encabeza el listado, seguido de México, Venezuela, Argentina y luego Chile. El ataque más recurrente en el país ha sido el ransomware, técnica utilizada por los hackers para bloquear dispositivos y exigir un rescate a cambio de recuperar el acceso. En ello, Chile se ubica en el tercer lugar en Latinoamérica y es número 10 del mundo. La segunda amenaza recurrente en Chile es el phishing o robo de información personal, como contraseñas o datos de tarjetas de crédito, que perjudica principalmente actividades y clientes del comercio mayorista, multitiendas y empresas de servicio. En tercer lugar están los ataques web, en los que Chile ocupa también el tercer lugar en Latinoamérica y 40 en el ranking global.
Hace unos días, el senador Kenneth Pugh dijo que es prioritario en este nuevo escenario de amplitud y dependencia digital la protección de los datos personales y la generación de la confianza digital. Para esto último, se están tramitando dos proyectos relacionados con la seguridad informática que conforman un gran sistema nacional de ciberseguridad: la ley de delitos informáticos y la ley que protege los datos personales. Además, se propone crear una Agencia Nacional de Protección de Datos, que será una entidad que fiscalizará el cuidado de la información, como también la fundación del Instituto Nacional de Ciberseguridad. Además, es necesario seguir enfatizando que las personas tomen más conciencia de los peligros que se generan al estar más expuestos a las redes digitales, ya que la mayoría de los ciberataques ocurren por responsabilidad de los usuarios. Según reportes y estudios de IBM y consultoras internacionales, más del 90% de los incidentes de ciberseguridad se producen por un error humano.