La austeridad es el sello que pretende instalarle a la Comisión de Descentralización de la Convención Constitucional, Adriana Ampuero, representante del distrito 26 en el órgano encargado de redactar la nueva Constitución.

Ampuero, quien es una de las coordinadoras de esta comisión, destacó el trabajo que realizarán en los territorios y también el interés que ha despertado el participar de las audiencias públicas, sobre todo en Los Lagos.

Junto con ello anunció que para el 20 de este mes tiene pactado un encuentro en Ancud, el que tendrá lugar entre las 8 y las 13 horas.

Además, en todo este aspecto, Ampuero colocó el acento en que tras reunirse con los gobernadores regionales, representantes de las universidades y de organizaciones sociales, se determinó que el sello de estos encuentros será el de la austeridad.

Junto con ello expuso que en esta zona tendrán participación también los constituyentes de los distritos 25 y 26 que integran esta comisión, como Harry Jürgensen (RN), Julio Álvarez (PS) y Gaspar Domínguez (independiente).

Ello, porque una de las definición adoptadas por la comisión, es que estos encuentros no generen gastos extras a la Convención, por lo que asistirán los constituyentes que vivan cerca de las comunas en los que se realice este despliegue que ejecutarán en todo el país.

Adriana ampuero, una de las coordinadoras de la comisión descentralización.

La falta de espíritu cooperativo en la población, pero también la falta de espacio para instancias cooperativas en las normativas y la legislación, son los principales obstáculos al potencial que sin duda tienen cooperativas y asociaciones para contribuir a sistemas alimentarios sostenibles, inclusivos y resilientes.

En el contexto de crisis por el que estamos transitando, las cooperativas y asociaciones permiten que los consumidores adquieran alimentos de calidad a un precio asequible, facilitan el acceso de pequeños productores a mercados y generan resiliencia y redes de apoyo cuya importancia ahora apreciamos más que nunca. Más allá, también ayudan a revitalizar saberes, culturas y métodos alternativos de producción e intercambio que constituyen valiosos reservorios de diversidad y que serán fundamentales para hacer frente a los desafíos de sostenibilidad de cara a la alimentación del futuro.

Para ello, es fundamental hacerles un espacio, reconociendo la diversidad de formas, objetivos y dinámicas que coexisten en el ámbito cooperativo y asociativo. Esto implica eliminar barreras administrativas, burocráticas y legales que, en su generalidad, no se adaptan ni funcionan en la realidad de las cooperativas y asociaciones. Las dificultades para acceder a servicios financieros básicos ante el desconocimiento de la forma jurídica de una cooperativa es, quizá, la ilustración más evidente de estas brechas.

El cooperativismo y la asociatividad pueden constituir herramientas de empoderamiento rural y ser grandes aliados en la reducción de las brechas urbano-rurales. La articulación entre cooperativas, con la academia y centros de investigación y con el sector público es clave para desplegar el potencial del cooperativismo.

Avanzar hacia sistemas alimentarios sostenibles, inclusivos y resilientes capaces de garantizar una alimentación suficiente, sana y adecuada para todas las chilenas y chilenos no va a ser fácil. En este sentido, el proceso constituyente es una oportunidad que no debiéramos dejar pasar para repensar la alimentación del futuro, comenzando por el reconocimiento constitucional del Derecho a la Alimentación como punto de partida.

Al removido jefe de la Brigada de Homicidios Metropolitana de la Policía de Investigaciones, Jorge Márquez, se le recuerda en esta zona por su accionar tras la desaparición de Viviana Haeger, hecho ocurrido hace ya 11 años. Y también de Mariela Barra, a quien hace una década se le perdió el rastro.

Márquez, quien por determinación de la institución policial, pasó a cumplir labores administrativas desde que se realizara la reconstitución de escena del homicidio de la subinspectora de la Policía de Investigaciones, Valeria Vivanco, hace más de una década fue sancionado por el caso de Viviana Haeger, la mujer que tras 42 días desaparecida fue encontrada en el entretecho de su casa en Puerto Varas.

En aquella oportunidad, la PDI ingresó a la mansarda de este domicilio sin encontrarla en circunstancias que se supone que estuvo allí durante todo el lapso en el que permaneció desaparecida.

Márquez era el jefe de la Brigada de Homicidios de Puerto Montt y fue sacado del caso, cuya indagaciones lideró en una primera instancia, según recordaron también algunos medios de la capital durante estos días.

Otro caso por el que se recuerda es por la desaparición de Mariela Barra, quien en julio cumplió una década desde que se le perdiera el rastro. Márquez habría sostenido que se trataba de un suicidio.

Márquez fue removido tras reconstitución de escena de homicidio de valeria vivanco.