Violencia en el sur e investigaciones
Informe de Observatorio Judicial revela que 88% de las causas por atentados carece de personas imputadas. Mientras se redactan querellas e incluso se invoca la ley antiterrorista, tal como en el caso de Fresia, por mientras son las víctimas las únicas personas conocidas.
El atentado incendiario que afectó a una empresa forestal en Fresia el pasado viernes, vinculado a supuestas causas indígenas, marca un lamentable hito para la Provincia de Llanquihue: se trata del primer suceso de esta naturaleza en el territorio. Y tal como ha sido la tónica, principalmente en el Biobío y La Araucanía, el Gobierno acudió a tribunales con una querella dirigida contra "todos aquellos que resulten responsables", sin tener evidencia concreta de quién o quiénes participaron del ataque contra un predio de AnChile y donde nueve máquinas resultaron completamente destruidas.
¿Cuál es el futuro de las investigaciones por sucesos similares un poco más al norte? Un análisis elaborado por el Observatorio Judicial, publicado en septiembre, y encargado por la Multigremial de La Araucanía, aporta un preocupante antecedente: en el 88% de las causas por atentados incendiarios no se ha identificado al autor de los hechos. Para este análisis se revisaron 391 causas vinculadas a ataques incendiarios en la macrozona sur, entre 2018 y 2020, de las cuales solo hay dos condenas y 10 formalizaciones. En la revisión se toman en cuenta eventos ocurridos en el Biobío, La Araucanía, Los Ríos y la zona norte de la Región de Los Lagos (provincia de Osorno). Respecto de esa cantidad de casos, según el Observatorio Judicial, el 88% son investigaciones "contra quienes resulten responsables": 343 casos. En el 5% (21 casos) hay personas identificadas como imputados, mientras que el 7% restante son causas de investigación reservada.
Es de esperar que la investigación llevada adelante por el Ministerio Público de Puerto Varas tenga un desarrollo distinto a las causas radicadas en la macrozona sur, puesto que mientras se redactan querellas e incluso se invoca la ley antiterrorista, tal como en el caso de Fresia, por mientras son las víctimas las únicas personas conocidas de un conflicto que durante los últimos años sólo han visto retrocesos y una normalización de la violencia.