Cuarta dosis y la variante ómicron
El inicio de la segunda dosis de refuerzo en esta jornada representa una nueva etapa en la lucha que el país está dando contra el covid-19. Pocas dudas hay en el hecho de que ha sido la masiva vacunación el factor principal que explica el relativo control de la pandemia en Chile.
Hoy lunes comenzará la aplicación de la cuarta dosis de la vacuna contra el coronavirus o segunda dosis de refuerzo, medida que fue confirmada la semana pasada por el Ministerio de Salud y que se da en el contexto de una nueva alza de contagios, especialmente por la presencia de las variantes delta y ómicron, esta última altamente contagiosa. Según el calendario, el proceso empezará con todas aquellas personas inmunocomprometidas que recibieron su dosis de refuerzo hasta el 12 de septiembre; es decir, pasados cuatro meses de su última inoculación. El segundo grupo en recibir esta vacuna serán los mayores de 55 años, quienes podrán inocularse desde el 7 de febrero próximo y que deben haber recibido la anterior dosis de refuerzo hasta el 15 de octubre.
Se ha hecho hincapié en que se seguirán fortaleciendo las estrategias de vacunación que han sido exitosas, sobre todo la denominada extramuros; es decir, fuera de los recintos de salud como tal y que permiten acercar el procedimiento a la comunidad, sobre todo en estos meses de verano. Es allí donde juegan un papel fundamental las decisiones que tome tanto la autoridad sanitaria como la red de salud municipal, que en gran medida asume la responsabilidad de concretar el proceso en las distintas comunas. La nueva dosis de refuerzo viene a responder la compleja situación que se está dando a nivel mundial con la nueva variante ómicron y, por ello, las autoridades han asegurado que el período de tiempo establecido para la vacunación no es casual.
Existe un reconocimiento transversal, tanto a nivel nacional como internacional, que Chile ha logrado posicionarse como líder en la campaña de vacunación, con un 58% de la población con campaña de vacunación completa y dosis de refuerzo, comparado con un 6,7% mundial. La diferencia es enorme y si bien pudiera significar mayor seguridad frente a la pandemia, tanto desde las autoridades como desde el ámbito científico y académico se plantea que hay que considerar la nueva ola de contagios que se observa en otros países y que debe mantener alerta a la población. Esto es lo que explica la importancia de continuar avanzando en el proceso de vacunación, que tan exitoso ha sido en Chile.