Correo
Esculturas en la Costanera
Con respecto al llamado a votar por las esculturas que tendrá el Parque Costanera quisiera hacer las observaciones que como ciudadano y habitante de Puerto Montt creo tener derecho. Me parece excesiva la instalación de una escultura de nueve metros de altura, y ello por más significativo que sea, no es necesario que sea vista desde toda la bahía y opaque otros símbolos de importancia. No estamos en el Antiguo Egipto ni en la Roma de César Augusto, y estas esculturas no deben pretenderlo.
A modo de este observador, debieran estar construidas en materiales nobles para que efectivamente se les otorgue el valor que merecen, como por ejemplo, el acero refundido, tantas veces utilizado en otras partes del mundo y con dimensiones similares a la estatura de las personas, con relevancia y altura para su vista. En el mismo sentido, y aceptando por supuesto lo decidido democráticamente, la escultura de los supuestos enamorados incurre en el mismo despropósito: gran altura en su estructura, invocando una canción popular de éxito, usando el nombre de nuestra ciudad porque sonaba mejor, no por otra cosa. La letra de la canción es triste y machista, es llamativa y comercial, pero en ningún caso representa el carácter y espíritu romántico de la gente de Puerto Montt.
Por último, la citada escultura de siete metros de altura, y que supone a dos enamorados, es inexpresiva, no hay encanto alguno del que produce ese noble sentimiento. Por el contrario, la actitud observable del supuesto enamorado es poner la pierna por detrás de su supuesta enamorada en posición dominante y machista, mientras ella permanece sumisa e imperturbable. Por mi parte, creo que hay manifestaciones del arte que son más recatadas y no recurren a las grandes dimensiones para lograr expresar con dignidad, valores y sucesos que debemos recordar por su trascendencia en el origen e historia de nuestra comunidad.
Francisco del Campo T.
Bikepark en el Cerro Philippi
Nuevamente se nos acusa con datos falsos e imprecisos respecto de nuestra presencia en el Cerro Philippi. Afirman que utilizamos el 50% del cerro, que tiene una superficie total de 135.426 metros cuadrados (13 hectáreas) y el bikepark utiliza 22.000 metros cuadrados (2,2 hectáreas, o sea, un 16%).
Dicen que el bikepark es utilizado por "señores con bicicletas de alta gama que han destruido especies nativas para construir el bikepark". El bikepark está diseñado para el uso de cualquier bicicleta. Si una persona tiene dinero para comprar una bicicleta "cara", eso no transforma al bikepark en elitista y exclusivo. Es cosa de ir a darse una vuelta y ver la cantidad de niños en bicis de 100 mil pesos que utilizan el bikepark. Y hasta el cansancio hemos aclarado que no hemos notado bosque nativo. Todas las pistas son mejoramientos sobre senderos ya existentes.
En octubre del año pasado le enviamos un correo al alcalde para poner fin al convenio, entendiendo que este documento no representaba a todos los usuarios del cerro y debía ser transformado en una especie de fundación o corporación que involucre a todos los usuarios. Creo que es necesario dar a conocer el montaje que está haciendo la junta de vecinos (usando sus contactos con concejales y autoridades con nulo conocimiento del cerro).
El verdadero motivo por el cual la junta vecinal nos quiere afuera del cerro es porque la hija de uno de sus dirigentes sufrió un accidente con un ciclista (que ni siquiera se puede saber si es parte de nuestro club, un turista, un ciclista externo, etc).
Felipe Candia, presidente del Club Mountainbike Ciclópatas de Puerto Varas
Saltarse la fila en Chile
Con las fiestas navideñas y próximas nuevas autoridades volvió a renacer la esperanza. Pero, en un local aquí cerquita llegó un cliente (quien había llamado un par de veces y no se le pudo atender por estar en inventario) y pasó directo al taller, saltándose la oficina de atención de clientes. Como se le volvió a manifestar lo mismo, que no se le podía atender hasta el día siguiente, el cliente salió y volvió a insistir directamente con operarios del taller, logrando su cometido, que lo atendieran de inmediato y antes que otros clientes, que se habían inscrito rigurosamente en la lista de espera.
Lamentablemente, esto pasa mucho en bancos, supermercados, etc. Los shilenos somos "avivados" para saltarse la fila. Así no será posible el sueño de igualdad de trato y servicio, característica de otras culturas y modelos.
Eduardo Romero
Parrillas veraniegas y covid
Me parece un despropósito que algunos municipios estén preparando y anunciando actividades veraniegas en medio del escenario de alza de contagios y llegada de ómicron.
¿Se harán responsables los alcaldes de los casos que aparecerán?
Esteban Meza