Covid: gobierno admite vacíos para fiscalizar el transporte intercomunal
PANDEMIA. Frente a críticas dirigidas a los aforos en minibuses que trasladan a pasajeros y el riesgo sanitario que podría provocar, autoridades indicaron que no tienen competencia para saber cuántas personas se suben a las máquinas. Empresario comentó que hacen lo posible para que los usuarios vayan sentados. Vecino de la Carretera Austral afirmó que algunas máquinas se llenan en la salida y no se cumplen normas sanitarias.
La otra cara de este verano y la alta afluencia de visitantes que llega a la zona en este periodo, trae aparejado aglomeraciones en terminales de buses, y también a nivel de pasajeros que se trasladan desde un punto a otro de la Región de Los Lagos.
En medio de la pandemia que sigue su curso y que parece no dar tregua, ha quedado en evidencia el intenso flujo que se moviliza especialmente en la provincia, uniendo el sector urbano y las localidades rurales cercanas. La mayoría de estos pasajeros busca recorrer los distintos parajes turísticos o trasladarse hasta sus lugares de origen, en minibuses de la locomoción interurbana, lo que ha provocado que muchos de ellos vengan con su capacidad a tope, convirtiéndose en una potencial fuente propagación del covid-19.
SIN COMPETENCIAS
En esta materia, tanto las autoridades de salud como de transporte expresaron que la normativa es limitada y que en el caso del primero, no tienen las competencias ni para fiscalizar los aforos ni delimitarlos en los medios de transporte.
La seremi de Salud (s) Marcela Cárdenas afirmó que la única acción que les compete es controlar que aquellas personas que vayan al interior de los buses utilicen correctamente sus mascarillas.
"Sin embargo, tenemos información de que Transporte ha cursado infracciones y ha hecho su trabajo, pero lo que sí se ha apreciado es que no es en los terminales de buses donde estos medios se llenan de gente, sino que a mitad de camino y en los paraderos", apuntó la autoridad regional.
De acuerdo a lo señalado por el seremi de Transporte, Nicolás Céspedes, el transporte público vivió una crisis muy fuerte en estos dos últimos años, debido a las restricciones de movilidad, lo que dificultó los niveles de conectividad de los más de 5 mil buses con que cuenta la región.
"En este escenario, muchos de ellos quebraron y cambiaron de rubro. Sin embargo, durante esta temporada estival el movimiento turístico ha sido extraordinario", señaló.
Ejemplificó que en el caso de la ruta bimodal, en el año 2019, hubo una oferta de 620 metros lineales y se lograba cubrir la demanda existente. Este año la oferta se duplicó, llegando a los 1.120 metros entre Puerto Montt, Ayacara, Chaitén y la Bimodal, que no dan abasto y sigue todo copado, dado también a que aún no se abre la frontera. "A esto hay que sumarle que hay mucha gente dando vueltas, paseando y el transporte público es escaso y estamos