Erwin Schnaidt

Para fines de junio está previsto tener los resultados del Undécimo Diálogo por Pensiones Dignas, que se realiza en todo el país a través de una conversación tripartita en la que intervienen representantes de los trabajadores, empleadores y el gobierno, con la finalidad de obtener un consenso de cara a una reforma al sistema de previsión social.

Esta semana tuvo lugar ese encuentro en Puerto Montt, en el que estuvo presente el subsecretario del Trabajo, Giorgio Boccardo, quien recordó que se trata de una iniciativa que desde su origen cuenta con la participación de la CUT y de la CPC, en la que sus participantes pueden dialogar sobre sus principios "a partir de los cuales se debiera construir un sistema de seguridad social".

Según expuso el ex presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh) entre los años 2006 y 2007, a nivel regional se considera audiencias que son lideradas por el secretario regional ministerial (seremi) del Trabajo, Ángel Cabrera, en las que los intervinientes pueden presentar sus propuestas. "En un acompañamiento técnico de la OIT y del BID, se diseñó una metodología que tiene una validación internacional. El BID va a hacer una recopilación de estos 16 encuentros (uno por región), para construir un informe final que nos permita diseñar la reforma al sistema de pensiones" que debería dar paso a la elaboración de la propuesta técnica que será enviada como proyecto al Congreso, lo que ocurriría a mediados de septiembre de este año.

- ¿Qué tan posible es que las propuestas que surjan en esta región, puedan llegar al informe final?

- Hemos visto que hay un ánimo de buena conversación; son más los acuerdos que los desacuerdos en los grandes principios. La gracia de este diseño es que una vez concordados ciertos principios del sistema, es mucho más sostenible hacer un diseño específico-técnico de la reforma. En ese contexto, estamos bastante optimistas de lo que hemos visto en regiones y esperamos que a partir de estos diálogos se pueda presentar un proyecto técnicamente eficaz, robusto, pero que también cuente con una legitimidad social importante, que permita que sea viable en la discusión parlamentaria.

- ¿Qué esperan cambiar del actual sistema de pensiones?

- Sobre pensiones en Chile se viene discutiendo desde hace más de una década. Ha habido distintas comisiones, se han hecho distintas propuestas de política pública, y el diagnóstico compartido es que el sistema de pensiones no da abasto para su objetivo y que requiere de reformas estructurales. Hubo intentos en los gobiernos de la Presidenta Michelle Bachelet y del Presidente Sebastián Piñera, que hicieron propuestas de reforma al sistema de pensiones y que lamentablemente no llegaron a buen puerto. Como gobierno estamos comprometidos con empujar un proyecto a partir de esos diagnósticos que se han realizado. Cuando escuchas los diálogos, hay una lectura bastante compartida sobre los bajos montos de las pensiones. Como gobierno queremos construir una reforma que cumpla su objetivo: que entregue pensiones dignas y que no ocurra que después de una vida de trabajo caigas en una situación por debajo de la línea de pobreza.

- Una reciente encuesta de Criteria, por encargo de la Asociación de AFPs, reveló que los trabajadores prefieren un sistema mixto, con participación del Estado y de empresas privadas. ¿Consideran ese antecedente?

- Hay dos discusiones a partir de esta pregunta. La primera tiene que ver con la forma cómo se construye el pilar distributivo, que pueda tener un aporte tripartito: de los empleadores, de los trabajadores y del Estado. Pero, que también existan mecanismos de solidaridad intrageneracional: es decir, de las personas que actualmente trabajan, hacia los jubilados; intergeneracional, pensando en las personas que actualmente trabajan, a los actuales jubilados; y también, solidaridad de género, para que también haya ciertos esfuerzos por solventar las pensiones de aquellas mujeres que, por distintas razones, han tenido la obligación de dedicarse a los cuidados. En ese contexto, hay que discernir entre la construcción de esos pilares, de ciertos mecanismos de solidaridad que tienen que tener todos los sistemas para asegurar pensiones al conjunto de la población, entendiendo que dentro del pilar contributivo van a estar los ahorros de las personas. Creemos que hay espacio para avanzar en esa dirección; pero, por supuesto, hay que esperar el resultado de estos diálogos para poder tener un diseño fino, técnico, sobre la reforma.

- ¿Los fondos de pensiones van a ser heredables, como lo ha dicho el Presidente Boric?

- El Presidente ha dicho que los actuales ahorros de los pensionados, son parte de los ahorros de ellos. En eso nos hemos comprometido como gobierno y no se va a modificar. Por otro lado, el Presidente Boric ha sido enfático en que buena parte del éxito de nuestro gobierno se juega en lograr una reforma al sistema de pensiones. A partir del proceso de diálogo y del trabajo que se tenga que hacer en el Parlamento, iremos avanzando para hacer que la reforma sea viable. Ese es nuestro mandato, en eso estamos trabajando. Como gobierno estamos siempre abiertos a ponderar que todos los aspectos que hagan que esta reforma, primero, esté organizada en base a todos los principios de seguridad social, se oriente al único objetivo que debe tener un sistema de pensiones, que es entregar pensiones. Y, que sea viable y legítimo para el conjunto de las actorías- Hay que pensar que los sistemas de pensiones en régimen en el mundo, demoran décadas en consolidarse. Por lo tanto, no es una reforma de corto alcance, sino que va a tener efectos importantes en las próximas décadas. De ahí que como gobierno hemos confiado en que a través del diálogo social se pueda ir construyendo y sosteniendo esta reforma.

"El Presidente ha sido enfático en que buena parte del éxito de nuestro gobierno se juega en lograr una reforma al sistema de pensiones"

"El sistema de pensiones no da abasto para su objetivo y requiere de reformas estructurales"