Correo
Homenaje a On Calisto
Mientras presenciaba en Temuco la obra" La Desideria" del teleteatro Radio Tanda (años 60, 70 y 80 por radios Minería, Cooperativa y Agricultura), donde Ana González personificaba a una ilusionada empleada particular de casa de aquellas épocas, al término se produjo un interesante conversatorio.
La ocasión dio paso al recuerdo del personaje regional On Calisto, que con cuyo humor blanco y jocosidad representaba al pescador isleño que viene al pueblo a vender sus choros, navajuelas, tacas y merluzas en tono amistoso y cordial, pero con mucha picardía en el trato con las caseritas. El recuerdo se centra en el programa radial de la Pérez Rosales y la Llanquihue en domingo dedicado a los enfermitos.
Guido Rosas primero y después Noé Hernández anunciaban "La chubascosa lluvia chilota de On Calisto y Chalaito", y las radios estaban todas con alto volumen en las casas para reunir a grandes y chicos. Así como escuchábamos a La Desideria en radios a tubos primero y después a pilas.
En el hospital viejo se ponían parlantes en pasillos para escuchar desde camas y camillas los saludos cómicos y deseos de bienestar a cada uno. En alguna oportunidad de los años 60, pudo On Calisto conocer a La Desideria, sueño que se concretó en Santiago.
En comunas como Calbuco, Maullín, Llanquihue y Fresia pedían la visita de On Calisto y su humor para animar más de alguna velada y disfrutar de su compañía junto al elenco dominical de las radios. Un homenaje emotivo para Ana González, La Desideria y también para Santiago Vera Espinoza, On Calisto, en el Día del Padre. Es mi padre.
Marcos Vera Oyarzo
"El diamante"
Mi hija mayor cuando tenía alrededor de 12 años me vio quizá algo preocupado y me preguntó si tenía yo problemas económicos. Le respondí que eventualmente los tenía, pero que no les daba mucha importancia, ya que debiéramos estar muy tranquilos, porque afortunadamente tenía muy bien guardado un diamante que valía una fortuna, pero que era el último recurso del que echaría mano.
Hace poco, haciendo recuerdos de su infancia, me confesó que ese diamante y su historia le produjo una felicidad y tranquilidad de vida hasta la actualidad. Ese diamante grande y valioso también me dio tranquilidad al pensarlo en momentos de angustia y vacas flacas.
Ahora quiero compartirlo con tanta gente angustiada por la carestía, la inflación la delincuencia o la falta de trabajo.
Enrique Montero
Protección a los carabineros
Ayer fue el Día del Padre y probablemente muchos estuvimos con nuestros hijos disfrutando de su compañía, un abrazo, quizá con la misma consistencia fraterna de cada día, pero con mayor intensidad y emoción. Sin embargo, para otros les fue más esquivo, por cumplimiento de sus múltiples funciones.
Entre ellos están los carabineros, aquellos 60 mil funcionarios preocupados de la prevención y la seguridad pública. Hoy urge un acuerdo nacional, político transversal, que les devuelva sus facultades en este calamitoso escenario de delincuencia y donde parecieran muy común los ataques cobardes y criminales hacia carabineros, donde la sociedad se está acostumbrando y normalizando a esta triste pandemia de violencia.
Pero no basta con titulares. Se requiere mayor capacitación en su formación, mejor remuneración, ambas aristas que sean un incentivo al ingreso a los planteles-escuelas de formación policial, interés que hoy se ve muy disminuido. Un apoyo real y sustantivo, que les entregue verdaderas facultades de procedimientos que garanticen su apoyo a la población que los requiere.
Feliz Día del Padre y entre ellos a Carabineros, que también lo son como garantes del bienestar de la tranquilidad y seguridad de la cual deben seguir siendo emblemas de confianza para nuestro país.
Eduardo Nievas Muñoz
Cuidar el tejado nacional
Días atrás el canal de televisión de películas antiguas trajo a la pantalla "El violinista en el tejado", un musical de 1971. Lo disfruté enormemente, mucho más que cuando lo vi por primera vez en los 70; era yo joven en ese entonces y con un gran futuro por delante.
Un violinista en un tejado, ¿peligroso, verdad? Todos somos un violinista en el tejado. ¿Y por qué si es tan peligroso seguimos arriba? ¿Cómo mantenemos el balance?
Las tradiciones y el comportamiento honesto de nosotros los chilenos mantienen el equilibrio; romper ese binomio es, simplemente, romper el tejado. Todos, ojalá sea así, queremos resguardar nuestro tejado nacional.
Gustavo Astorquiza
Resultado de la Convención I
Si los dueños de casa somos todos, creo que fue una muy mala señal no invitar al acto más importante de la Convención a todos los ex Presidentes. ¿Cuán "de todos" es la casa de todos?
Por negativo que sea, lo anterior es coherente con la situación en que está el proyecto de Constitución: si a estas alturas el proyecto no está sobre 75% en su aprobación como correspondería a una Constitución concebida para perdurar, el fracaso de la Convención es rotundo, aun cuando se produjera un vuelco y ganara el Apruebo por unos puntos.
¿Por qué estamos donde estamos? Primero, la explicación era que no se podía criticar porque aún no estaba lista; ahora que está lista el argumento es que hay mucho desconocimiento. Sólo falta escuchar la excusa final ante una derrota, no sólo conceptual como la de hoy, sino también numérica-electoral.
José Luis Hernández
Resultado de la Convención II
La Convención tenía un fantástico piso de 78% para que su trabajo, la nueva Constitución, efectivamente fuera una casa para todos y que su legitimidad al menos se acercara a esa proporción. El tribalismo y las identidades, lamentablemente, llevaron a otro camino.
Pedro Sandoval
"Orgullo y decepción"
Sí, orgullo y decepción, ya estamos curtidos, que lástima para su familia, pero "al que le quepa el poncho que se lo ponga".
José Manuel Caerols