María Consuelo Ulloa

757 mil electores en la región, que deberán acudir a 1.966 mesas, distribuidas en 182 colegios, son los números macro del próximo plebiscito en Los Lagos, para el que la dicotomía Apruebo-Rechazo llevará a la ciudadanía a las urnas.

Un proceso que tendrá apenas 13 locales de votación más que en las elecciones presidenciales de 2021, en el que Puerto Montt lidera con 39 establecimientos, luego Puerto Varas con 11 y Calbuco con 8. Maullín tendrá 6, Llanquihue y Cochamó 4, en tanto Los Muermos, Frutillar y Fresia con 3; para un total provincial de 81 recintos con 928 mesas y un padrón de 358 mil electores.

Confirmados los locales de votación, en los últimos días el rol del Servel ha sido cuestionado por sectores políticos. Pero, expertos locales respaldan su actuación y avizoran que, pese a lo importante de las votaciones, los resultados confiables se conocerán rápido y que la participación será alta, gracias a la obligatoriedad de participación y a la georreferenciación que se hizo con los votantes y sus lugares de votación.

Respaldo

Sobre la incertidumbre que algunos han planteado por la transparencia del Servicio Electoral, Pedro Díaz, director de la Escuela de Administración Pública de la Universidad Austral de Chile (UACh), cree que "el Servel ha sido reconocido como un organismo técnico altamente especializado, que ha tenido una eficacia que potencia nuestra democracia. Durante años, y a diferencia de lo que ocurre en otros países, la ciudadanía espera los resultados de elecciones y plebiscitos con una confianza bien ganada y sin miedo a un fraude electoral".

"A mi entender, parecen injustas la mayoría de las críticas que le hacen al organismo. Los principales cuestionamientos que se la han hecho se relacionan con 'la depuración del padrón electoral' y la georreferenciación. Al respecto, es importante señalar que desde el año 2012 la inscripción es automática, por lo que todos los ciudadanos quedaron en el padrón. Luego, se hizo un proceso de 'afinamiento' de los registros, lo que requería la colaboración del Registro Civil. Por lo tanto, el padrón electoral actual responde a ciudadanos que aparecen como votantes vigentes, a partir de lo que informa el Registro Civil".

Sobre la georreferenciación que se usó para determinar los locales de votación de las personas, que también ha sido criticado, María Cristina Schwabe, directora de la carrera de Derecho de la sede de la Patagonia de la Universidad San Sebastián (USS), explicó que "como todos los sistemas, por supuesto que puede estar sujeto a ciertas fallas. Creo que hay detrás un esfuerzo importante por facilitar la participación, el sufragio. Eventuales imprecisiones o errores tienen que ver por una parte con los sistemas y, por otro, también porque los domicilios electorales registrados o la última información con la que cuentan los servicios públicos en general, tampoco son todo lo precisos que deberían ser y por ahí podría haberse generado mayores inconvenientes. Tiendo a pensar que la mayoría de las personas efectivamente están asignadas a locales de votación más cercanos a sus domicilios".

Sobre este punto, Díaz dijo concordar y agregó que "hay un 68% de los votantes georreferenciados, lo que permitiría y facilitaría la participación en una votación que tiene el carácter de obligatoria. Considero que la georreferenciación es una medida adecuada que debió implementarse antes".

Explicación

Teresa Ríos, jefa de Fiscalización y Formación Ciudadana de Servel Los Lagos, manifestó que "es una ley que se dictó para acercar a la ciudadanía a sus locales de votación (...), pero se dieron distintas situaciones, porque hay gente que no actualizó su domicilio electoral, otras personas que no lo visualizaron correctamente. La georreferenciación hoy en día, a veces uno pone hasta el Waze y siempre le da como un distanciamiento para todo".

Ríos reconoció que además hubo movimiento de locales. "Por ejemplo, en el centro de la ciudad a veces había cinco locales, pero se dejaron dos. Se tomó una masa electoral acorde a la georreferenciación, por eso es que hubo cambio de mesa y de local para algunos electores", especificó.

Sobre la hora en que podría haber resultados definitivos, estimó que "el procedimiento del elector cuando va a la mesa a sufragar, va a ser rápido. La diferencia es que en esta oportunidad, con la nueva ley, antiguamente las mesas tenían 350 ciudadanos, hoy en día tienen 400. También la diferencia es que va a haber más votantes, porque no es voluntario, el voto es obligatorio. Obviamente, va a haber una diferencia en factor tiempo, pero siempre el sistema es tan transparente, tan ágil y tenemos los vocales de mesa que son siempre preparados con anticipación. Tenemos toda la esperanza, el optimismo que va a ser un proceso rápido. No debiéramos tener mayores inconvenientes. Será un proceso limpio, transparente y eficiente".

"Sufragar no es solamente un derecho; o sea, es un derecho sin duda, pero es también un deber. Es un deber, en definitiva, hacernos responsables de las decisiones políticas como sociedad, en la que participamos todos", reflexionó finalmente Schwabe.

196 mil votantes están autorizados para sufragar en Puerto Montt. En la presidencial votaron 102 mil personas en la comuna.

504 son las mesas que se dispondrán en los 39 locales de votación que estarán dispuestas en la capital regional.