Protección del mar
En esta zona hay particular interés en torno al cuidado que necesita el territorio marítimo. Tanto por historia como por movimiento económico, Los Lagos debiera ser un actor relevante a la hora de hablar del mar.
Ha costado concretar la negociación internacional para lograr el cuidado de los océanos más allá de las aguas de cada país. La zona que se conoce como "altamar" requiere protección especial y los países miembros de la ONU no alcanzan acuerdos suficientes todavía; de hecho, la semana pasada decidieron postergar las conversaciones, que comenzaron en 2018 y se han ido aplazando por diversas razones.
Uso sostenible y conservación son algunos de los conceptos en los cuales es preciso avanzar, considerando el cambio climático, la depredación que sufren algunas especies y la contaminación que implican tanto las explotaciones como los desplazamientos. Esta temática es muy sensible para Chile, cuya geografía está definida por el océano Pacífico, su desarrollo se encuentra ligado al comercio marítimo y ha expresado públicamente por décadas su voluntad de conservación. Actualmente el país cuenta con una superficie de áreas marinas protegidas superior a un millón de kilómetros cuadrados; mayor incluso que su superficie continental, que es de 750 mil kilómetros cuadrados.
En ese grupo reguardado hay reservas marinas (pequeñas zonas de reproducción de especies de interés pesquero o zoológico); las áreas marinas y costeras protegidas de múltiples usos (AMCP-MU), que resguardan hábitats, pero permiten una explotación con pesca no invasiva, y los parques marinos, con protección completa y prohibición de actividad extractiva, salvo un uso de comunidades tradicionales.
En abril pasado se anunció además que el país creará el Parque Marino Tictoc Golfo de Corcovado, en la Patagonia, zonas relevantes para la ballena azul. El tema es amplio, estratégico y de altísimo interés nacional, en particular para una región como Los Lagos, con una vocación marítima indeleble y muy activos sectores productivos que tienen al mar como su escenario; además de un creciente interés por una protección efectiva de la fauna marina.
Aquí, más que en ningún otro lugar, conceptos como uso sustentable y conservación debieran estar en la mente de todos.