Cristina Fernández acusa de "pelotón de fusilamiento" a tribunal que la juzga
ARGENTINA. Ayer fueron los alegatos finales y el veredicto por posible corrupción cuando era presidenta se conocerá el próximo martes 6 de diciembre. La vicepresidenta denunció que fue víctima de una "estigmatización".
El veredicto del juicio que tiene en el banquillo de los acusados a la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández, por presunta corrupción cometida durante sus períodos como mandataria (2007-2015) se conocerá el 6 de diciembre, anunció ayer el tribunal que lleva el caso.
Tras escuchar las palabras finales de Fernández, que los tildó de "pelotón de fusilamiento", los jueces Jorge Gorini, Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu, integrantes del Tribunal Oral Federal 2, detallaron que el próximo martes deliberarán para emitir su sentencia.
Esta no es la única causa que afronta Cristina Fernández en la Justicia, pero se encendió la polémica el año pasado porque en tres causas -"Dólar Futuro", "Memorando con Irán" y "Hotesur y Los Sauces"- logró su sobreseimiento antes de que comenzaran las audiencias orales, aunque los tres expedientes están en revisión en tribunales superiores.
En tanto, la causa conocida como los "cuadernos de la corrupción" todavía no ha sido elevada a juicio.
Ataque
En este caso, que tiene 13 imputados, se juzgan las presuntas irregularidades en la concesión de 51 obras públicas a firmas del empresario Lázaro Báez durante los Gobiernos del fallecido Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015) en la provincia de Santa Cruz, cuna política del kirchnerismo.
El presidente argentino, Alberto Fernández, apoyó este martes a su vicepresidenta en su cuenta de Twitter: "Como decía Francisco Carrara, cuando la política entra en los tribunales, la justicia se escapa por la ventana".
En 2019, a días de asumir como vicepresidenta, cuando fue citada a declarar, pero no respondió preguntas, Cristina Fernández había acusado a los jueces de ser "un tribunal del 'lawfare' (guerra jurídica)" y de tener "la condena escrita", pero que a ella la "absolvió la historia" y, en cambio, a los jueces "seguramente les va a condenar la historia".
Ayer retomó sus palabras para indicar que en esa ocasión fue "muy generosa" y que, después de todo lo que le ha tocado vivir, en relación a la acusación y al fallido atentado que sufrió el 1 de septiembre, por el que hay tres detenidos, el tribunal "en realidad es un verdadero pelotón de fusilamiento".
Por una videoconferencia desde su despacho del Senado, Cámara de la que es titular, Fernández dijo que todo se inició a "partir de la increíble diatriba" de los fiscales que "se dedicaron a injuriar, agraviar, denostar y actuar no conforme a derecho", sino como editorialistas de los principales diarios del país; y anticipó que iba a publicar en sus redes sociales las "veinte mentiras de la causa vialidad".
La vicepresidenta está acusada de haber cometido delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta de fondos públicos, por lo que, el pasado 22 de agosto, la Fiscalía pidió para Fernández una condena de 12 años de prisión y la inhabilitación para ejercer cargos públicos de por vida.
El 1 de septiembre pasado, la exmandataria salió ilesa de un ataque perpetrado frente a la puerta del edificio de Buenos Aires en el que vive, durante una manifestación de seguidores que le transmitían su apoyo después de que fiscal solicitara la condena por presunta corrupción.
"estigmatización"
La vicepresidenta identificó la causa con un fusilamiento porque "los fiscales no pudieron responder a ninguno de los hechos" y "no pudieron replicar ni desmentir ninguno de los hechos" que relató la querella y ella en las presentaciones.
Previó que esta causa será estudiada como "ejemplo" de cómo los juzgados pasaron a "convertirse en partidos políticos".
"Esta estigmatización, sin prueba y en violación abierta de la constitución, para dar carácter de asociación ilícita a tres gobiernos elegidos democráticamente, veremos si, realmente, como pienso, la historia también los va a condenar", dijo al tribunal.
En tanto, volvió a contrastar su situación con la del expresidente Mauricio Macri (2015-2019), hoy opositor, porque no tiene "ningún problema" y está en Qatar, presenciando el Mundial de Fútbol, pese a haber endeudado al país con el FMI por 45 mil millones de dólares que no se sabe "dónde están", dijo.
"¿En serio que creen que nuestro Gobierno cometió un fraude a la administración pública?", les preguntó, al mencionar que su gestión entregó un Estado desendeudado, que la de Néstor Kirchner pagó la deuda con el FMI y que las condiciones de vida de la gente eran superiores a las actuales.