Nuevo ensayo confirma eficacia de fármaco experimental contra el alzhéimer
ESTUDIO FASE 3. Lecanemab se llama el medicamento administrado a cientos de pacientes y tuvo efectos adversos importantes. De todas formas, es calificado como "esperanzador", pues un cuarto de las personas disminuyó los síntomas.
Agencias
Un nuevo ensayo clínico confirmó la eficacia del fármaco experimental lecanemab para disminuir los efectos de la enfermedad de Alzheimer, aunque también señala sus efectos adversos y la necesidad de estudios más prolongados.
El estudio de fase tres, publicado por The New England Journal of Medicne, fue llevado a cabo en diversos centros médicos durante 18 meses, con un total de 1.795 pacientes de entre 50 y 90 años y en las primeras etapas de la enfermedad.
Los resultados del ensayo clínico muestran que el anticuerpo monoclonal "reduce los marcadores de amiloiodes en el alzhéimer temprano, y resulta en un declive moderadamente inferior en las mediciones cognitivas y de funciones en comparación con el placebo". Es decir, tendria un efecto positivo en la reducción del deterioro cognitivo.
En particular, el fármaco permitió ralentizar este declive en aproximadamente un cuarto durante los 18 meses que duró el estudio.
Las conclusiones del estudio añaden no obstante que el fármaco "fue asociado con efectos adversos" y subraya la necesidad de "ensayos más prolongados para determinar la eficacia y la seguridad del lecanemab en el alzhéimer temprano".
DEtALLE DEL ESTUDIO
Los datos del estudio revelan que de los 1.795 participantes del ensayo, 898 recibieron lecanemab y 897 un placebo.
Al final del ensayo, entre los pacientes del grupo del lecanemab, se registraron 0,7% de muertes y en el grupo de placebo 0,8%.
El estudio, que asegura que ninguna muerte estuvo relacionada con lecanemab, precisa que se produjeron efectos adversos graves en el 14% de los participantes del grupo del fármaco y en el 11,3% de los del grupo de placebo.
Los resultados sobre la eficacia del medicamento son similares a los anunciados en septiembre pasado por la farmacéutica nipona Eisai y por la estadounidense Biogen, responsables de su desarrollo, en su propio ensayo clínico.
Aquel estudio arrojó una reducción del 27% en el empeoramiento de los síntomas entre el grupo que recibió el fármaco comparado con el que recibió el placebo, y ya a partir de los seis meses "el tratamiento mostró cambios estadísticamente significativos" en la evolución cognitiva, según ambas farmacéuticas.
Eisai y Biogen tienen previsto iniciar en enero el procedimiento para solicitar la autorización del fármaco en Estados Unidos, y en fechas próximas en Japón y Europa.
Dudas por dos muertes
Pero estos días la revista Science publica un artículo en el que alerta que se produjo una segunda muerte entre las personas que estaban probando este fármaco; en este caso se trata de una mujer de 65 años que murió tras sufrir una hemorragia cerebral, y observa que algunos científicos sí relacionan esa hemorragia con el fármaco experimental.
Algunos científicos citados por esta revista insistieron en la importancia de que los reguladores extremen las precauciones antes de su aprobación y tengan muy en cuenta los significativos efectos secundarios que se están registrando entre los pacientes, ya que todavía existen -mantienen- muchas incógnitas.
Los últimos resultados del ensayo clínico, sin embargo, "son muy esperanzadores", dijo a Efe la neuróloga y directora de la Unidad de Diagnóstico de Ace Alzheimer Center Barcelona, Vanesa Pytel, centro de referencia de esta enfermedad que aportó para este estudio inicialmente 28 pacientes, que en la última fase de extensión fueron finalmente 18, con una respuesta "positiva" en general, dijo Pytel.
"muy esperanzador"
En todo caso, indicó que los pacientes monitoreados por Ace están dentro de los resultados del estudio general, que arroja una reducción del 27% en el empeoramiento de los síntomas entre el grupo al que se administró el fármaco experimental comparado con el que recibió el placebo.
"Son resultados muy gratificantes y esperanzadores para la comunidad científica, pacientes y familiares, entendiendo que es un ensayo clínico; ahora a ver qué pasa con las agencias de medicamentos para poder llevarlo al mundo real", destacó la neuróloga.
Pytel resaltó que el medicamento se aplicó en pacientes "con un diagnostico muy temprano, con deterioro cognitivo o demencia leve, lo que resalta la idea de la importancia de que el diagnostico temprano abre la puerta a este y otros ensayos".
Pytel destacó que los efectos adversos están todos reportados en el estudio y que consisten en edemas o microsangrados, pero que en los pacientes de ACE no hubo efectos secundarios graves.
1.795 pacientes con alzhéimer en sus primeras etapas y de entre 50 y 90 años, fueron parte del ensayo fase 3, que duró 18 meses.
65 años tenía una mujer que se convirtió en la segunda muerte que algunos científicos asocian al fármaco experimental.