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"Mitos sobre parcelaciones"
El problema de las parcelaciones ha sido debatido durante este año y lo seguirá siendo. Es importante centrarse en aquellos aspectos que permitirán aclarar conceptos. Uno de ellos es la idea de que "hay que aumentar el tamaño de la subdivisión predial mínima". Los defensores de esta postura sostienen que debiese aumentarse de 0,5 há a 1-10 há, el ministro Esteban Valenzuela ha dicho que el Ministerio de Agricultura (Minagri) impulsará aumentar a 2 há el tamaño mínimo.
Es una medida errónea si se hace sin distinguir: los ecosistemas funcionan como un todo conectado y una de las estrategias que tienen mucha efectividad al momento de conservarlos o restaurarlos, es generar grandes corredores biológicos que estén conectados. Puede parecer contraintuitivo decir que lotes más pequeños sean mejores que los más grandes, pero explicaré el argumento con un ejemplo. Supongamos que tenemos un campo de 100 há que se lotea en 50 lotes de 2 há de manera uniforme (como propone el Minagri), dividimos ese ecosistema en 50, ahora los animales van a tener menos espacio para recorrer y es probable que el bosque se comunique peor por la construcción de caminos a lo largo de la subdivisión.
Ahora tomemos ese mismo campo y dividámoslo en 50 lotes de 0,25 há que se concentran en la entrada del campo, y un lote de 87,25 há. En el segundo caso uno puede decir que de hecho se dividió solamente en dos, un sector habitado por personas compuesto por 50 lotes y un corredor biológico bastante más significativo, donde el ecosistema está mejor conectado. En el segundo ejemplo los metros de camino construido son menores, la fauna nativa tiene un espacio mayor para recorrer y el bosque queda mejor comunicado, por lo que el ecosistema tiene más fuerza.
También es mejor desde el punto de vista económico, es menos costoso el desarrollo; casas cercanas pueden optar a soluciones compartidas donde se dividen los costos (agua, luz, alcantarillado). Se gana por donde se lo mire. El ejemplo es simplista, pero ilustrativo, porque lo que falta para que la segunda opción sea realmente sostenible es una normativa para que el lote grande no se pueda subdividir nuevamente, que determine la cantidad de subdivisiones permitidas por proyecto y el tamaño mínimo permitido. Que además los lotes chicos no se puedan intervenir de una manera incompatible con el ecosistema que los rodea y que existan reales incentivos a incluir las tradiciones locales.
Por último, que la nueva comunidad que se forma tenga una estructura de administración que la organice, de tal manera que no se forme caos que pueda alterar el ecosistema. Todos estos puntos son claves y debiesen ser considerados en la futura legislación. Cuando un proyecto reúne y soluciona todos esos puntos se puede decir que es armónico con el ecosistema, o que es eco-habitable. Es importante ir derribando mitos y aclarando conceptos, esto es sólo el inicio.
Cristián Ugarte, gerente general de Armoniza
Empresas neurodivergentes
Temple Grandin, zoóloga, escritora y charlista estadounidense, relata que en un momento de su vida se dio cuenta de que pensaba diferente al resto de las personas. Ese descubrimiento marcó un antes y un después, como para muchas otras personas que, como ella, pertenecen al espectro autista. Sus investigaciones dieron cuenta de que existen pensadores en imágenes y en patrones, que no todo el pensamiento humano es lineal y se basa en el lenguaje.
Una gran revelación, pues supone, entonces, que los seres humanos procesamos la información y las experiencias de forma distinta y, por lo tanto, interpretamos y damos soluciones a los fenómenos de maneras diversas. Hoy es común escuchar hablar de neurodiversidad, un término que cada día se va asentando en la sociedad, instalándose así en muchas empresas que han visto el tremendo potencial que puede significar contar con equipos neurodivergentes, como un valor humano agregado.
Personas que tienen condiciones como dislexia, dispraxia, déficit atencional con hiperactividad (TDAH) o que pertenecen al espectro autista, nos regalan miradas y procesos que enriquecen los resultados al interior de las organizaciones y que a la vez las desafían, pues éstas deben garantizar ciertas adecuaciones para que todas las personas, independientes de su condición, desarrollen su máximo potencial, en un espacio propicio y respetuoso de las características individuales.
Líderes de grandes organizaciones como Dell Technologies, EY, Freddie Mac, Google, HP, Microsoft, SAP, entre otras, han traspasado los sesgos inconscientes para dar paso a la contratación de personas neurodiversas, lo que nos muestra que un cambio de mirada en un líder genera -a su vez- cambios profundos en la sociedad que queremos conquistar.
Vania Brugal y Alejandra Ríos, académicas de la Universidad Andrés Bello
Mujeres y directorios
Actualmente, el gobierno del Presidente Gabriel Boric ha puesto en discusión en el Senado la participación de la mujer en los directorios. Sin embargo, entre dilemas y diatribas, Chile está atrasado al menos seis años en esta discusión tan relevante para el desarrollo de los mercados. Pese a esto, temo que esta urgente iniciativa será difícil de instalar, perdiendo nuevamente grandes oportunidades para grandes temas nacionales.
Los estudios internacionales muestran que la presencia de la mujer en el directorio se correlaciona positivamente con la eficiencia en la supervisión de los procesos estratégicos, lo que mejora el desempeño de la empresa en la industria. Otra relación positiva es que su presencia en el directorio mitiga los conflictos de intereses entre los ejecutivos y los accionistas, como también mejora el desempeño financiero y control de las decisiones riesgosas; además, la presencia femenina en los comités de auditoría mejora las prácticas y el uso discrecional de la información interna.
Esta iniciativa del Ejecutivo, independiente de la coyuntura económica, política y social, es una buena oportunidad para darle mayor eficiencia a los mercados, y acelerar el desarrollo de mejores estrategias corporativas mediante la incorporación de las mujeres en los directorios.
Iván Araya, académico de la Universidad Autónoma de Chile
Arbitraje chileno y Qatar 2022
El Campeonato Mundial de Fútbol de Qatar 2022 ha dejado al desnudo la poca relevancia que tiene el arbitraje chileno a nivel internacional. El hecho que haya un solo representante nuestro, y que además que haya sido considerado solamente para el VAR, es un indicio que algo no funciona internamente.
Por lo tanto, si no se toman cartas en el asunto, difícilmente habrá posibilidades de participar en eventos de gran envergadura.
Jorge Valenzuela Araya