China acusa a EE.UU. de "agravar tensiones" con el pacto militar que firmó con Filipinas
CONFLICTO. El secretario de Estado Antony Blinken viajará a Pekín para intentar apaciguar los ánimos. Tensiones aumentaron tras giras de líderes de EE.UU. y la OTAN por Asia reforzando su presencia y lazos para enfrentar a Rusia y China.
China acusó a Estados Unidos de "agravar las tensiones en Asia" después de que Washington y Manila pactaran el acceso de tropas estadounidenses a cuatro bases "estratégicas" en el archipiélago asiático, un movimiento clave ante una posible invasión de Taiwán por parte de Pekín.
"La cooperación en materia de Defensa no debería tener como objetivo apuntar a nadie o dañar los intereses de un tercer país. Por puro egoísmo y con una mentalidad de 'suma cero', Estados Unidos sigue impulsando su presencia militar en Asia agravando las tensiones", afirmó la portavoz de Exteriores china Mao Ning a una pregunta sobre el pacto.
El acuerdo "completa" el Pacto Mejorado de Cooperación en Defensa (EDCA), firmado en 2014 entre ambos países y por el que Estados Unidos ya podía utilizar cinco bases militares del archipiélago filipino, clave en el enfrentamiento entre China y EE.UU. por la influencia en la zona.
Según la portavoz Mao, "China está comprometida con la defensa de la estabilidad y la paz regional".
"Hay que poner ya fin a la narrativa de la 'amenaza China' y cualquier intento de incitar a la confrontación", indicó.
Por otra parte, el acuerdo constata la manifiesta intención del nuevo presidente filipino, Ferdinand "Bongbong" Marcos, hijo del fallecido dictador homónimo y quien juró el cargo el pasado 30 de junio, de redirigir el enfoque de la política exterior filipina, después de que su predecesor, Rodrigo Duterte, apostara más por la relación con Pekín.
Duterte llegó incluso a fulminar temporalmente el acuerdo que, desde 1999, permite a EE.UU. mantener presencia militar en el archipiélago y que da cobertura legal para que las tropas estadounidenses entren en Filipinas para maniobras conjuntas.
Además, Filipinas y EE.UU. mantienen otros tratados en materia de seguridad de mayor calado, como el Acuerdo de Defensa Mutua, que data de 1951.
Blinken viaja a china
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, viaja esta semana a China, donde mantendrá reuniones los días 5 y 6, para ahondar en la relación bilateral y evitar que la competencia que mantienen acabe generando un conflicto.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, explicó que el viaje de Blinken es consecuencia del encuentro mantenido entre Biden y Xi el pasado noviembre en Bali, donde ambos mandatarios reconocieron la "magnitud" que supone su relación bilateral, la "más relevante" del planeta.
Ahondar en las conversaciones, dijo Price, es ahondar también en el "corazón" de la relación bilateral: La "competencia" entre ambos países y evitar una "espiral" que pueda convertir dicha competencia en un conflicto.
"Se trata simplemente de una cosa, que abordemos la relación bilateral más relevante y compleja del planeta pensando que la competencia (entre ambos) no deriva en un conflicto", recalcó el portavoz de la diplomacia estadounidense, quien no confirmó si Blinken se reunirá con el presidente Xi Jinping.
Por eso defendió que ambos países pongan "barreras" a esos posibles elementos de conflicto y actúen de forma "responsable" en estas conversaciones, porque "así lo espera el resto del mundo".
Lazos OTAN Y EE.UU.
Las nuevas tensiones se dan luego de que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, emprendieran esta semana giras por varios países de Asia para reforzar sus lazos de seguridad con sus aliados en la zona frente a Rusia y el expansionismo de China en la región.
El acuerdo constata la manifiesta intención de Marcos, hijo del fallecido dictador homónimo, de redirigir el enfoque de la política exterior filipina, después de que su predecesor, Rodrigo Duterte, apostara más por la relación con Pekín, en detrimento del histórico vínculo con Washington.
En Japón, el responsable de la alianza mandó un mensaje de unidad junto a Tokio en su posicionamiento frente a China, país al que ven como un "desafío" de magnitud creciente, debido en parte a "sus amenazas a Taiwán", destacó el jefe de la OTAN.
El paso de Stoltenberg por Corea y Japón sucede a la asistencia de Yoon y su par nipón, Fumio Kishida, a la cumbre de la OTAN de junio en Madrid, y subraya la colaboración entre la alianza y sus socios en la región en un momento considerado como "el entorno de seguridad más grave y complejo desde el fin de la II Guerra Mundial".