El pasado viernes 24 de febrero, la empresa productora de salmón Caleta Bay Agua Dulce, informó el escape de peces de sus centros de cultivo Phillipi y Puerto Phillipi, ubicados en el lago Llanquihue, en el sector de Totoral, en la comuna de Llanquihue.

La empresa a través de un comunicado aseguró que fueron "víctima de un sabotaje" y que a partir del "ataque provocado por terceros", escaparon cerca 60 mil peces. También consignaron en el escrito que pudieron constatar "cortes en tres redes peceras", situación que habría provocado dicho incidente.

"El hecho es consecuencia de un acto delictual atribuido a terceros, de acuerdo a lo que pudimos verificar en nuestros sistemas de seguridad, y fue notificado a las autoridades competentes, incluidas policía y fiscalía", aseguró Caleta Bay.

En este sentido, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) Los Lagos, también a través de un comunicado, confirmó que, durante la jornada del jueves 23 de febrero, recibieron "una notificación por parte de la empresa", informando del hecho.

"Funcionarios de Sernapesca Los Lagos que llegaron hasta el lugar para fiscalizar la activación de planes de contingencia por parte de la empresa, lograron comprobar el evento de escape, además de confirmar en uno de los centros, a través de la revisión de cámaras de vigilancia y la inspección de los centros de cultivo, que el escape sería producto de acciones de terceros", explicó la entidad de gobierno.

En el escrito de prensa enviado por la compañía Caleta Bay, el gerente de producción de agua dulce, Rodrigo Salgado, indicó que este tipo de hechos dañan la imagen de la salmonicultura.

"Es lamentable tener que pasar por situaciones como estas, en las que atentados de terceros tan solo buscan daño y además causan menoscabo reputacional a la industria", enfatizó el ejecutivo.

En agosto de 2022, tras la detención de Héctor Llaitul en el Biobío, el líder de la Coordinadora Arauco Malleco, un comunicado de la organización llamaba a "continuar y comenzar nuevos procesos de recuperación en contra del gran capital, a través de un verdadero control territorial, como también a "continuar con la resistencia y sabotajes en contra, principalmente, de la industria forestal, hidroeléctrica, minera y salmonera".

Por ahora, al cierre de esta edición, nadie se ha adjudicado la acción cometida contra la salmonera en las aguas del lago Llanquihue.

Condena

Tomas Monge, director territorial de SalmonChile, asociación que agrupa a las principales empresas productoras y proveedores de salmón del país, se refirió al hecho ocurrido en Llanquihue. "Como gremio manifestamos nuestra preocupación y total condena a estos graves hechos vandálicos que ocurrieron en el lago Llanquihue. Lamentablemente no es primera vez que ocurren actos de sabotaje contra centros de cultivo de salmones en agua dulce, por lo que esperamos que se investigue a fondo para esclarecer quiénes causaron estos daños", expresó Monge.

Desde Sernapesca informaron que, del total de los peces escapados, "20.780 corresponden a trucha arcoíris con peso promedio de 23,2 gramos y 39.243 a salmón coho de peso promedio 419,4 gramos". Agregando que "estos últimos se encontraban en tratamiento médico veterinario, por lo que no son aptos para consumo".

Hasta el día de ayer, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, informó que los peces

"Atentados de terceros tan solo buscan daño y además causan menoscabo reputacional a la industria"

Rodrigo Salgado, Gerente de producción de agua dulce