Vecinos de Oelckers advierten los riesgos que presenta un muro en malas condiciones
PUERTO MONTT. Aseguran que las mayores complicaciones suceden en tiempos de lluvia, debido a que se desmorona, generando peligro a quienes transitan por un lugar que no cuenta con veredas para el traslado de las personas.
"Cada vez que llueve, cada invierno que pasa, una parte del muro se cae (...)". Apunta Malva Valenzuela, presidenta de la Junta de Vecinos Bellavista, respecto a la situación que presenta un muro ubicado en Federico Segundo Oelckers, en la población Bellavista de Puerto Montt y que tiene en estado de alerta no solo a los vecinos del sector, sino que también a quienes transitan a diario por el lugar, ya sea en vehículos o caminando.
En su relato, comenta que el "agua que escurre por el lugar hace que el cerro se deteriore cada vez más" y, por lo mismo, propone que se construya un muro de contención.
El problema, según dice, tiene relación con el riesgo que corren las personas que caminan hacia el centro producto de que es tránsito obligado para ellos, así como también para quienes acuden a los establecimientos educacionales del sector, como la Escuela Bellavista.
De ahí su preocupación, ya que a este escenario se suma a "quienes suben hacia el Colegio Salesianos o a Presidente Ibáñez", los que, además, no cuentan con veredas como paras para su traslado".
"Hay una línea amarilla que separa la calle del tránsito peatonal, pero está en la calle, con el peligro que implica porque los autos pasan a alta velocidad", detalla.
La dirigente insiste en que las mayores complicaciones se viven en invierno, sobre todo en días de fuertes lluvias, producto de que se "desmorona el cerro. De hecho, caen piedras".
La visión de la dirigenta es compartida por el vecino Gastón Ojeda, quien sostiene que una de las complicaciones tiene que sobre el cerro hay una casa, que es una "toma, desde la cual caen aguas servidas hacia un lugar donde hay bastantes matorrales. En el fondo, unos arbustos que ya son árboles y que han hecho que el cerro se debilite, por lo que siempre se está cayendo. Entonces, lamentablemente, al no tener espacio para vereda, se marcó una línea amarilla por la que pasa la gente pensando que es la vereda".
Sin embargo, acusa que "los vehículos no respetan esta división, por lo que pasan por sobre ella, con el peligro que ello implica, puesto que por este lugar transitan muchas personas, sobre todo niños que van a la escuela".
Por lo mismo advierte que en caso de que ocurriese un derrumbe más grande, por que hasta ahora han sido pequeños, "la gente no tendría nada que hacer, porque están los vehículos a un costado y en la parte de atrás el cerro".
De ahí que su preocupación radique en que si no se realizan acciones, pudiese suceder una "remoción en masa".
Intervención
Alejandro Vergés, director regional del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), comenta que una vez que recibieron la información de parte de vecinos respecto a lo que sucede con este muro, se la hicieron llegar al municipio de Puerto Montt, el que, a su vez, dispuso del envío de un equipo técnico para realizar la intervención que fuese necesaria.
En efecto, desde la corporación edilicia informaron que luego de lo planteado por los vecinos, acudieron al terreno ubicado en el sector de Federico Oelckers, Bellavista.
Lugar donde personal de la Dirección de Medio Ambiente, Aseo, Ornato y Áreas Verdes (Dimao) realizaron operaciones de despeje y limpieza de matorrales.
En tanto, sobre el peligro que existe en el lugar, el periodista y máster en Protección Civil y Gestión de Emergencias, Luis Toledo, señala que la intervención vial en las terrazas de Puerto Montt, puede ocasionar que las laderas no queden bien estabilizadas, lo que genera el rodado de piedras, que se incrementa los días de intensas precipitaciones y que constituye un riesgo principalmente para los peatones y automovilistas. "Es un fenómeno que se repite en varios puntos de la ciudad, como la cuesta de la Población 22 de Mayo o la Cuesta Santa Teresa. La recomendación a los peatones, en caso de ser posible, es elegir la vereda de enfrente y a los automovilistas a transitar con máxima precaución", remarca.
"Hay una línea amarilla que separa la calle del tránsito peatonal, pero está en la calle, con el peligro que implica porque los autos pasan a alta velocidad"
Malva Valenzuela, presidenta de la Junta de Vecinos Bellavista