Freno al cáncer del cuello uterino
La vacunación en las menores, durante su etapa escolar, es crucial para frenar el avance de esta patología. El Virus del Papiloma Humano puede provocar en las mujeres más del 70% de los cánceres uterinos y de vagina. De ahí la relevancia de la vacunación.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que una buena parte de la población sexualmente activa sufrirá cáncer de cuello uterino en algún momento de su vida. Por ello, se ha conmemorado el día de la prevención de esa patología con actividades destinadas a informar a la población sobre la importancia de que las mujeres se efectúen en forma periódica controles ginecológicos, considerando que es la segunda causa de muerte por cáncer en mayores de 35 años en el mundo
Esta enfermedad es causada por el Virus del Papiloma Humano (VPH), que se contagia por contacto sexual. Desde 2014, el Ministerio de Salud de Chile incluyó dentro del Plan Nacional de Inmunización la vacuna contra el VPH en dos dosis, para niñas de cuarto y quinto básico. Sin embargo, los estudios indican que los hombres transmiten el virus, pudiendo ser portadores sin tener conocimiento de esta condición, por lo que se sugiere la vacuna también para los niños. La aparición de este cáncer es más frecuente entre los 35 a 55 años, pero debido a que el tiempo entre la infección por VPH y el desarrollo de la patología es de 20 años en promedio, las personas con más riesgo de infectarse son las niñas y adolescentes. Por ello, se recomienda la vacunación a la edad más temprana posible.
Es un virus muy común, pero dependiendo de sus características de riesgo, puede causar en las mujeres más de 70% de los cánceres uterinos y de vagina. De ahí la seriedad con la que los gobiernos han asumido este plan de inmunización. Los especialistas señalan que este cáncer no presenta síntomas hasta que se encuentra ya avanzado, de manera que la prevención es fundamental para evitar que se desarrolle esta enfermedad, que en Chile causa más de 600 muertes anuales de mujeres jóvenes.
Desde el inicio de esta campaña en 2014, se han aplicado más de un millón de dosis de vacunas en el país en este grupo objetivo y no se han presentado efectos adversos de consideración, por lo que se trata de una vacuna segura, que requiere de dos dosis, con un intervalo de un año.
La Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología ha señalado que hay que establecer acciones de educación y entregar información relevante para evitar este tipo de patología.