Sergio Silva

Familias enteras terminaron la noche del jueves al interior de sus vehículos para no perder su lugar en la fila que se generó ante el cierre del paso Cardenal Antonio Samoré (aduana chilena) para viajar hacia Argentina. Y es que las dependencias funcionan a contar del 1 de abril entre las 8 y 18 horas; previamente el cruce estaba operativo entre las 8 y 20 horas.

Sin duda la nueva restricción horaria tuvo efectos evidentes en más de un centenar de vehículos que no pudieron cruzar al territorio argentino, precisamente en el inicio de Semana Santa, que por años ha sido una de las épocas donde se registra un considerable aumento en el flujo.

Lenta espera

"Quedé en el puesto 88, antes de llegar al Salto de los Novios. Al contar hacia atrás, la fila sobrepasaba los 120 vehículos. Por suerte pedí permiso en el trabajo y salí de Osorno cerca de las 15.30 horas para cruzar antes del cierre. Con mi pareja determinamos pasar la noche en el auto con los hijos y así esperar temprano y poder cruzar la frontera", comentó el profesor Raúl Añasco.

El osornino terminó sus trámites aduaneros cerca de las 9.20 horas tras esperar su turno por cerca de 60 minutos y llegó a la aduana argentina cerca de las 11.30 horas.

"El trámite es rápido, pero depende de la cantidad de personas con las que viajes. En mi caso éramos cuatro y teníamos todos los papeles en regla para salir y llegar a Bariloche. Ahora viajo pensando en el regreso, ya que el lunes hay que volver a trabajar", sostuvo.

Según los informes reunidos por este medio, sólo el jueves pasaron por la frontera en Puyehue 5.586 personas, de las cuales 3 mil 977 salieron hacia Argentina.

La jornada de ayer se vivió el mismo escenario que el jueves, pero en esta ocasión la hilera para emigrar sobrepasó los 7 kilómetros y llegó hasta la zona de El Caulle, según constató Carabineros.

"Eso ocurrió cerca de las 13.00, pero ya con el correr de las horas disminuyó debido a que algunos conductores determinaron no cruzar la frontera", comentó el jefe de la Tenencia de Carabineros, Emanuel Guerra.

Los servicios dispuestos en el complejo fronterizo reforzaron su personal con la finalidad de poder entregar una rápida atención, sin embargo el colapso generó un evidente malestar entre los usuarios.

Claudio Filgueira viajó desde Valdivia y su intención junto a su polola era llegar a Bariloche, lo que no pudieron concretar. "Pensamos que había un accidente porque el tránsito estaba lento, pero nos dijeron que era la fila para llegar a la frontera. Quedamos cerca del puente, antes de Anticura, pero optamos por regresarnos. Supimos que el día de ayer (jueves) se cerró a las 18 horas y hubo gente que se quedó en la ruta. Optamos por irnos a Frutillar y regresar el domingo a Valdivia", expresó.

La mañana de ayer la delegada provincial (s) de Osorno, Danitza Ortiz, hizo un llamado a planificar los viajes.

"Sobre la situación que ocurre en el paso Samoré, queremos hacer un llamado a las personas que este fin de semana desean usar la vía, a que sus viajes sean planificados y programados con anticipación. Eso significa cumplir con las exigencias que disponen los equipos de la PDI, SAG y Aduana. Este fin de semana se reforzaron los puntos de control y del personal", detalló.

Pese a los anuncios de las autoridades, el tema preocupa a los diferentes entes ligados al turismo de ambos países.

Rosa Villalobos, directora de ArgChiturismo, dijo que el complejo fronterizo se ha visto colapsado en varias ocasiones.

"Hay que aumentar las oficinas de atención, con ello también la dotación del personal que trabaja y, por cierto, mejorar la infraestructura y tener un complejo fronterizo con horario completo", fue parte del diagnóstico de la directora de ArgChiturismo.