(viene de la página anterior)
Quiero agradecer al presidente, Germán Mayorga, y la comisión fútbol, que se ha hecho cargo y partícipe de esta enfermedad, que no les corresponde realmente, pero han estado ayudándome. Me contaron que hay buenas noticias, está saliendo humo blanco y aprovecharemos este momento para operarme.
-Estuvo varios partidos fuera, ¿la razón de no haber estado en cancha, y ni siquiera citado, fue por esta enfermedad?
-Sí, ese fue el verdadero motivo. No fue lesión ni nada, de hecho veía comentarios y me mordía la lengua para no responder y decir lo que tenía. No quería que se supiera esto a tontas y a locas. Quería hacer bien el procedimiento, que me digan qué es lo que tengo que hacer, saber bien lo que tenía.
Es decir, nunca fue un tema de lesión ni nada, fue por los chequeos médicos que duraron casi un mes, entre tres a cuatro semanas que estuve en eso. Al final, ya estaba agotado sicológicamente.
-¿Qué sentía usted sobre el murmullo y los cuestionamientos a sus no citaciones?
-Me molestaba un poco, porque nadie me preguntó qué pasaba y cuando me empezaron a preguntar no quise dar información. Me respaldé con el área médica del club y me quisieron proteger de esa forma, sin dar información de lo que tenía. Era prácticamente como decisión técnica, siendo que no era así. Ellos velaron por mi bienestar.
-El cáncer le puede suceder a cualquiera, ¿siente que ustedes los futbolistas están desprotegidos ante esta enfermedad?
-Totalmente. Le puede pasar a cualquiera y tuve la mala suerte de que me tocó a mí y vivirlo es complicado. Han sido cuatro meses muy movidos, ya que todo es nuevo para mí. Nadie en mi familia había tenido cáncer y esto es mala suerte... si te toca, te toca y hay que tratárselo. No hay ningún seguro que diga que me puedo operar en un mes o en una semana. Si no se hace de manera particular o en el servicio público, que eso se tarda de seis a nueve meses, que es lo mínimo que me decían los doctores.
Así que no tenemos ningún respaldo real de cómo afrontar esta enfermedad, que es común en la gente en general, solamente que en los futbolistas, como trabajamos con nuestro cuerpo, es más shockeante la noticia, pero todos estamos propensos a un cáncer.
-¿Cree que quizás el Sifup (Sindicato de Futbolistas Profesionales) podría hacerse parte de esto, pensando a futuro y quizás tomar algún tipo de seguro con alguna fundación, por ejemplo, para que tengan cobertura en eventos de este tipo?
-Sí, obvio. Creo que todo empieza a avanzar cuando comienzan a pasar las cosas. Me tocó vivirlo a mí, le pedí ayuda al Sifup, pero no tenían seguros que me pudiesen ayudar. Fueron acercamientos que tuve con el sindicato, la voluntad de ellos siempre estuvo, pero no había un protocolo a seguir. Quizás esto pueda servir a futuro a otras personas, espero que no, pero en el caso de que le sucediera a otro futbolista, tener un resguardo y tranquilidad de que esto se puede tratar de la forma correcta.
-Cuando Germán Mayorga le da la noticia de que por fin podrá ser operado, ¿cuál fue su reacción?
-Fue después del partido ante Santiago Morning, de la bonita sorpresa de haber salido jugador del partido. Iba subiendo la escalera hacia el camarín y estaba él (Mayorga) y me dice que me tiene más sorpresas buenas, y que posiblemente me iba a operar muy pronto. Yo quedé con sensaciones encontradas, no me esperé esa información y para mí, ese día, fue un día mágico en ese sentido.
-¿En qué consiste la operación?
-Es sacarme la tiroides. Tengo cáncer a la tiroides y además ganglios cancerígenos. Esto quiere decir que se está ramificando un poquito el cáncer, lo cual implica una operación un poquito más larga. En este tipo de cáncer te extirpan la tiroides y quedas con medicamentos. Puedes hacer tu vida normal, pero en mi operación tienen que sacarme ganglios, así que los extirparán.
Esto es, no sé si un poco más complejo, pero tarda un poquito más de tiempo.
-¿Y cuánto tiempo estaría fuera de las canchas?
-Me dijeron que de tres a cuatro semanas estaría normal, ya haciendo actividad física.
-¿Cómo fue la reacción de sus compañeros cuando supieron que tenía cáncer?
-Al principio fue muy schockeante. Esta enfermedad la llevo bien, pero para mis compañeros, al principio, fue muy schockeante cuando lo contaron. El kine fue el que habló ante el grupo. El shock de mis compañeros cuando supieron que tengo cáncer me dio pena. No había sentido eso en todo el proceso que sabía que tenía cáncer sin decirlo, que fueron aproximadamente entre 2 a 3 semanas. Cuando me tocó escucharlo delante de todos fue distinto.
Sin embargo, rápido empezaron las bromas para levantar el ánimo y que estaría bien. Y al final, lo manejamos de buena manera, no tratándome como "pobrecito".
-¿Sintió en algún momento que si se hablaba de cáncer, automáticamente se hablaría de un desenlace fatal?
-Creo que para el que no maneja el tema de mi cáncer, el de tiroides, piensa automáticamente que es algo de mucho riesgo y los doctores me han dejado en claro que no es tan así. Y así me lo han planteado, que si tuviera que elegir un cáncer, este es el mejor cáncer que me pudo haber tocado. Que en toda operación hay algún tipo de riesgo y esta no es la excepción, pero no es una cirugía que demande mucho estrés para los médicos. En ese sentido me dejaron todo claro y así lo he estado viviendo. Y de hecho ahora la gente que me envía mensajes de "pobrecito", dejarles claro altiro que voy a estar bien, que muchas gracias por los saludos y la preocupación, pero estaré bien.
-¿Ha sentido el apoyo de sus compañeros y del cuerpo técnico que encabeza Erwin Durán?
-Totalmente. Los profes constantemente me están preguntando. De hecho, se hace un poquito molestoso a veces, porque a mí se me olvida que tengo cáncer. Voy a entrenar, se me olvida y de repente me preguntan cómo está eso y al final me hacen recuerdo. Pero sé que lo hacen en el buen sentido de saber cómo estoy de ánimo y en general. Y mis compañeros igual, siempre en las mismas apoyándome en lo que necesite.
"El cáncer le puede pasar a cualquiera. Tuve la mala suerte de que me tocó y vivirlo es complicado. Han sido cuatro meses muy movidos, ya que todo es nuevo para mí" "No había sentido pena en todo este proceso que estuve sabiendo que tengo cáncer sin decirlo y cuando me tocó escucharlo delante de todos, me dio pena al ver a mi compañeros" "A la gente que me envía mensajes de 'pobrecito', dejarles en claro altiro que voy a estar bien, que muchas gracias por los saludos y la preocupación, pero que estaré bien"